La Ruta de la Tapa demuestra el alto nivel de los cocineros almerienses  

La VIII edición de la Ruta de Tapas por Almería está marcando un antes y después en este evento, en el que se está mezclando la satisfacción por parte de los organizadores del evento y responsables de los bares por la acogida que está teniendo y el eco conseguido fuera de la ciudad, con resultados excelentes.

Por parte de los tapeadores que acuden a los bares a probar bocados exquisitos de la cocina en miniatura, también existe expectación y satisfacción, por la respuesta de los cocineros y establecimientos en general que se han esforzado en presentar tapas novedosas y muy cuidadas para esta edición.

Esto viene a demostrar el excelente nivel alcanzado por la cocina almeriense, que cuenta con cocineros de gran valía, que han sabido adaptarse a los gustos y tendencias actuales. Los participantes en la ruta de la tapa agradecen la combinación de las nuevas tapas gourmet o actualizadas con las tradicionales de toda la vida, como esa carne con toma te de toda la vida con patatas fritas de ojo de perdiz en sartén o la tradicional cazuela de mero blanco a la marinera del Bar Los Domínguez en el barrio de El Zapillo.

La mezcla de sabores y texturas, así como esas recetas de las abuelas de toda la vida, se puede encontrar, para deleite de todos, durante estas fe chas en nuestros bares de la capital. Esto les sirve, a su vez, de revulsivo y aprendizaje a los establecimientos para conocer la demanda de sus clientes.

Por otro lado, hay que destacar el gran calado que está teniendo la Ruta de la Tapa entre los universitarios, sobre todo entre los de otras provincias y países, para conocer nuestra gastronomía.