“Los responsables de este desastre no pueden irse de rositas”

Él nada tuvo que ver con su esperpéntica construcción, pero la alargada sombra del hotel de El Algarrobico le persigue a Salvador Hernández (Carboneras, 1975) desde que llegó a la alcaldía de Carboneras en 2011. 

Usted siempre ha sido favorable a que el hotel se mantenga en pie. ¿Por qué?
Es lo que me dice el sentido común, y también la población de Carboneras y la provincia. Cuando hay un edificio prácticamente terminado, que ha necesitado de una inversión millonaria, lo normal es que se ponga en funcionamiento y se generen puestos de trabajo. Sin entrar a valorar si el edificio es legal, ilegal, irregular, feo o bonito. 

¿Y sentar un precedente? ¿No cree que los turistas vienen  atraídos por la virginidad de la costa y no por el ladrillo?
Estoy de acuerdo. Pero también es cierto que en el Parque Natural de Cabo de Gata-Níjar las plazas hoteleras son escasas. En Carboneras, ese hotel es totálmente compatible con el turismo tranquilo que busca playas vírgenes. Carboneras no está capacitada para acoger el turismo que nos llega; de hecho, se tienen que ir a otros pueblos más allá del Parque Natural. Y las 500 plazas hoteleras de ese hotel, ni mucho menos van a convertirnos en un Benidorm. Carboneras es un municipio con cerca de 20 kilómetros de costa, así que es totalmente compatible.

Usted conoce muy bien a los vecinos de Carboneras. ¿Aceptan de buen grado la demolición del hotel?
Los carboneros lo que estamos es un poco indignados con el daño mediático que se nos está haciendo desde las ciudades que no conocen Almería ni Carboneras. Tengo la sensación de que se creen que todo es corrupción y especulación urbanística, y obviamente, los ciudadanos estamos un poco cansados de que se nos considere favorables a un desarrollismo salvaje. En el pueblo, la gente se levanta todas las mañanas para ir a trabajar, los niños para ir al colegio, y el mundo sigue con su rutina. Carboneras seguirá navegando por su futuro, el hotel ni mucho menos nos va a frenar, porque tenemos más activos.

 ¿Ha tenido contacto últimamente con el alcalde que impulsó su construcción, Cristóbal Fernández?
Cuando entramos al Ayuntamiento en 2011 ni siquiera vino a recoger el acta de concejal. Me tenía que dar el bastón de alcalde, pero no se presentó.

 ¿Entonces, no tenéis contacto?
No, nunca. En 2013 lo invitamos al bicentenario de Carboneras como municipio turístico, pero ni contestó.

 ¿Qué responsabilidad le atribuye en este desaguisado?  
Los padres del hotel de El Algarrobico son la Junta de Andalucía y el Partido Socialista de Carboneras. 

Sin embargo,la actual presidenta de la Junta, Susana Díaz, ha dicho estos días que la playa jamás debió alterarse.
Hablar está bien, pero todos los ciudadanos sabemos que los responsables de este despropósito están en la Junta de Andalucía. Son sus antecesores. Por mucho que quiera estar en contra de un supuesto urbanismo salvaje, ellos son los padres del desaguisado. Para mí, las de Susana son palabras huecas de cara a la galería.

Todavía no hay fecha para el derribo. ¿Tiene pensado ponerse en contacto  con Junta y Gobierno central para saber cuándo arrancarán?
No. Yo creo que sobre el hotel de El Algarrobico todavía queda mucho por decir. Tenemos claro que no se va a abrir, pero que vaya a derribarse es otra historia. 

 ¿No cree que vayan a demolerlo?  
Creo que lo que está haciendo el Gobierno autonómico es hablar por hablar.

 Pero los jueces ya han dictado la última palabra: que es ilegal.  
Sí, pero tenemos que tener claro que sobre el terreno hay un edificio construído, que ha costado muchos millones de euros, y que a la empresa que ha contado con todos los beneplácitos para levantarlo tendrán que indemnizarla.

 ¿Y tienen que ser las administraciones las que paguen la indemnización con el dinero de los ciudadanos?  
(Se lo piensa). Yo no creo ni dejo de creer. Lo que sí sé es que cuando la empresa se pone a construir el hotel, lo hace porque tiene todas las licencias. De hecho, la empresa le compra el terreno a la Junta de Andalucía. Es la propia Junta la que especula con el terreno: se lo vende a un promotor y resulta que con el paso de los años no es urbanizable. No es la promotora ni el Ayuntamiento quienes ponen los límites al Parque Natural, es la Junta de Andalucía, a pesar de lo que diga la señora presidenta. Es la Junta la que se está haciendo trampas a sí misma, y nos está haciendo trampas a costa de todos los contribuyentes. 

 Alguna responsabilidad tendrá también el Ayuntamiento de Carboneras...
Mira, han pasado muchos años con el hotel paralizado y no hemos visto asumir ninguna responsabilidad política. Ni a nivel local, ni a nivel autonómico. Obviamente, los responsables del desaguisado son del partido de Susana Díaz. No son ni del PP, ni de Podemos, ni de Ciudadanos.

Pero bueno, entonces, esto ¿quién lo paga?
Lo que no nos podemos permitir los ciudadanos es que ese hotel que ha costado una millonada se tenga que derribar ahora. Ni tampoco que seamos los contribuyentes los que paguemos el desaguisado cuando no se ha asumido ninguna responsabilidad política ni técnica.

¿Entonces? ¿Se tiene que compensar a la empresa o no?
(Ríe) Eso lo tienen que decidir los jueces, no yo. Lo que está claro es que la gran damnificada con este despropósito es Carboneras. Además, la Junta tiene la obligación de resarcir el terrible daño causado a los ciudadanos de mi pueblo. No queremos buenas palabras, queremos hechos: un plan de empleo que genere puestos de trabajo entre los desempleados.

 ¿Qué margen de actuación o colaboración tiene el Ayuntamiento?  
Poco. Nosotros dimos la licencia de obra, y este es un procedimiento reglado. No se puede denegar cuando una empresa cuenta con todas las autorizaciones . Se tiene que dar la licencia sí o sí. 

 Me refiero a la licencia de derribo...  
Antes de derribarlo, se tendrá que decidir... No creo que la empresa quiera permitir que se derribe el hotel sin recibir una indemnización de la administración competente, que en este caso no es el Ayuntamiento sino la Junta de Andalucía. Y me explico: el Ayuntamiento da la licencia en su día en base a los informes de la Junta.

Pero algo falló... 
Pues ya lo dijo en 2006 el juez de Almería Jesús Rivera: que se habían modificado y manipulado búrdamente los límites del Parque Natural. Y la persona que manipuló búrdamente esos planos, obviamente, está en la Junta, no en el Ayuntamiento de Carboneras ni en el de Salamanca. Y si esa maniobra de manipulación de planos la hizo la Junta, obviamente lo haría con la connivencia del alcalde de Carboneras. 

Pues parece que nadie ha asumido su responsabilidad...   
Lo vuelvo a decir, yo creo que la justicia tiene tareas por delante, o debería de tenerlas. No puede ser que se vayan de rositas los responsables de este desastre. Porque el daño hecho es tremendo.