La respuesta de Medio Ambiente a los requerimientos del Ayuntamiento de Almería para terminar con las plagas de mosquitos en el entorno del río Andarax lleva sello de devolución. La Junta de Andalucía entiende que la solución para tratar los afluentes de aguas residuales al cauce del río procedentes de los municipios del Bajo Andarax pasa por que el Ayuntamiento capitalino autorice una “arqueta de llegada” a la Estación Depuradora de Aguas Residuales de El Bobar.
Una estación que ya tiene capacidad para recibir todas estas aguas residuales después de que las obras de ampliación terminaran en febrero, asegura el delegado territorial de Medio Ambiente, Antonio Martínez, que insiste en que “no hay ningún problema técnico para tratar el afluente del Bajo Andarax”. Al revés, hasta la fecha, están operativos dos de los cuatro reactores biológicos y “lo ideal es que funcionen los cuatro simultáneamente”.
Así las cosas, el máximo responsable de Medio Ambiente en la provincia asegura que en cuanto se haga una perforación para habilitar una arqueta de llegada, El Bobar podrá depurar las aguas residuales que hoy acaban en el cauce del río y son una de las causas, no sólo de los malos olores, sino también de las constantes plagas de mosquitos.
La autorización del Ayuntamiento para hacer esta arqueta y empezar a depurar es sólo una de las dos cuestiones pendientes. Faltaría, además, que el Consistorio de Almería firmara un convenio con la Mancomunidad de Municipios del Bajo Andarax para que se “determine la tarifa” a aplicar por el tratamiento de las aguas residuales. Según el delegado, este convenio ya se ha pedido y quedaría únicamente concretar día y hora para hacerlo realidad.
¿Bastará con El Bobar?
Una vez solventadas estas dos cuestiones, Medio Ambiente entiende que se solucionará el problema de los mosquitos. Algo que, de momento, y por mucha prisa que se den tanto el Ayuntamiento de la capital como la Mancomunidad del Bajo Andarax (los municipios tendrían que hacer obras para conectarse con la depuradora) no llega antes de la eclosión de larvas de mosquito de esta primavera.
De hecho, el Ayuntamiento de Almería anunciaba el martes la adquisición de biocidas por valor de más de 6.500 euros destinados a tratar las riberas del río y evitar, en la medida de lo posible, que los mosquitos inunden los barrios próximos al Andarax.
El Ayuntamiento de Almería, que sí agilizará todos los trámites solicitados para mejorar la depuración, instará a la Junta (a través de una moción) a tomar otras medidas en el Andarax. Medidas que van más allá de la depuradora, en la que la Junta ha invertido 9,3 millones.
Más medidas
Pedirá Almería a la Junta la eliminación de las aguas estancadas en el cauce, el tratamiento de las zonas verdes y la reducción de la capa vegetal en el cauce del río Andarax.
No llega a tiempo
La apuesta de la Junta de Andalucía para terminar con las plagas de mosquitos en el entorno del río Andarax a través de la depuración de aguas residuales no llega a tiempo para esta primavera. Consciente de ello son los miembros del equipo de gobierno municipal que insisten en la necesidad de que Medio Ambiente tome medidas complementarias para evitar molestias y también problemas de salud a los ciudadanos. Entre estas medidas, apuestan por la eliminación de las aguas estancadas en el cauce del río. Aguas sucias que provocan no sólo la aparición de mosquitos, sino también malos olores y ratas, como se quejan los vecinos de los barrios más próximos al cauce.
La limpieza de la capa vegetal, su reducción o eliminación total, es otra de las propuestas del PP en el Ayuntamiento, al menos, hasta que la depuradora pueda actuar como solución.
Consulte el artículo online actualizado en nuestra página web:
https://www.lavozdealmeria.com/noticia/12/almeria/103105/la-junta-ve-en-un-bobar-al-100-la-solucion-a-la-plaga-de-mosquitos