La carretera N-340a, más conocida como El Cañarete, que une la capital almeriense con el núcleo roquetero de Aguadulce, abre nuevamente a partir de hoy lunes de forma intermitente para avanzar en los trabajos de consolidación y protección del talud bajo, que se ubica la vía y en el que se actúa desde el pasado mes de noviembre, cuando se produjeron unos desprendimientos a causa de unas fuertes lluvias.
Según explicó el viernes el subdelegado del Gobierno en Almería, Andrés García Lorca, en declaraciones a los periodistas, la carretera se abre sentido Aguadulce-Almería de 0,15 horas a 9,30 horas, y en sentido Almería-Aguadulce de 14,00 a 16,00 horas y de 21,00 a 0,00 horas, con el objetivo de asimilar el tráfico en horas puntuales para evitar conglomeraciones en la autovía A-7.
Uso restringido
La razón por la que el tráfico volverá a interrumpirse está en el avance de las obras, en las que se incluye la edificación de un muro de entre 15 y 20 metros de altura que protegerá la carretera ante posibles nuevos desprendimientos. "Esto va a obligar a que el ciudadano tenga que sufrir algunas molestias, puesto que a pesar de que el ritmo de la obra es intenso, por seguridad vial, tenemos que restringir el uso", explicó el subdelegado.
Conclusión
No obstante, según apuntó, los trabajos podrían finalizar por completo antes de que termine el mes de mayo, momento en el que el tráfico quedaría completamente restablecido, para lo que se trabaja de lunes a sábado.
Por otra parte, el representante del Gobierno en la provincia explicó que también se va a realizar una pequeña actuación en otras zonas de cornisa en las que se han detectado leves desprendimientos, con el que se va a afianzar la malla metálica para evitar caídas de piedras.
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