Cuando el pasado jueves el consejero de Salud de la Junta de Andalucía, Aquilino Alonso, aseguraba en el Parlamento que el SAS está en conversaciones con la empresa adjudicataria del Hospital Materno Infantil de Almería para reanudar las obras, paralizadas desde 2011, en las bancadas de los parlamentarios almerienses de la oposición se recibía el anuncio con enorme sorpresa. No en vano, lleva años siendo uno de los argumentos de batalla contra el Gobierno socialista de la Junta en materia de política sanitaria en Almería, sobre todo para el Partido Popular. Pero en pocas horas, la sorpresa inicial ha dado paso a valoraciones mucho menos complacientes con los responsables políticos de la Administración autonómica.
Contencioso La noticia -publicada ayer por este periódico- de que la empresa constructora, la UTE Acciona-Tejera, había iniciado ya el pasado mes de enero acciones judiciales contra el SAS para reclamar daños y perjuicios por el retraso de las obras y, poco después, una acción administrativa para rescindir el contrato es interpretada por el PP como un nuevo engaño de la Junta en relación con este asunto.
Rosalía Espinosa, parlamentaria andaluza del PP almeriense que habitualmente defiende los temas de salud de la provincia, asegura que, según su información, lo que ha cambiado no ha sido un inicio de negociaciones, como lo planteó el consejero, sino que en el SAS se ha recibido una notificación judicial para que se persone y presente documentación en relación con el contencioso interpuesto por la empresa. “Creo que el consejero ha sido muy torpe. Tendría que haber dicho la verdad, que hay un problema con la empresa, que esta quiere rescindir el contrato y que habría que ir a una nueva adjudicación, pero creo que lo que pretendían al hablar de negociación es decir luego que la empresa no se avenía a negociar y que había que adjudicar de nuevo”, señala Espinosa.
Objetivo electoral La parlamentaria popular considera que “han sido tres presidentes, Chaves, Griñán y Susana Díaz, y tres consejeros, María Jesús Montero, María José Sánchez y el actual los que nos han estado engañando con el Materno Infantil”. De Aquilino Alonso no cree que ignore la evolución del proyecto, puesto que antes de consejero ha sido director gerente del SAS. “Me parece que es imposible colársela, yo antes pensaba que estaba mal informado pero le he pillado ya en dos, otra con el Hospital de Poniente, y creo que es demasiada casualidad”, subraya la representante del PP.
En su opinión, lo que el propio titular de Salud expuso la semana pasada en el Parlamento a una pregunta de Podemos “tiene un objetivo de campaña” para responsabilizar a otros, en este caso a la empresa, de que la obra siga paralizada. “Me parece que ha sido muy torpe”, valora la parlamentaria popular, “y creo que nos engañan, la anterior excusa es que se iba a cambiar el proyecto para adecuarlo y poder construirlo con fondos europeos”.
Pedir responsabilidades El proyecto, recuerda Espinosa, tuvo asignación presupuestaria durante los dos primeros años, 2011 (en que se puso la primera piedra) y 2012. Por eso, no se explica cómo, habiendo dinero consignado, no se pagaron las certificaciones a la empresa adjudicataria, que ahora reclama ante los tribunales que se le indemnice.
Desde este punto de vista, considera la parlamentaria del PP que la UTE “hace muy bien” interponiendo acciones judiciales contra el Servicio Andaluz de Salud “por su poca seriedad”. Y va más allá. Cree incluso que alguien se puede plantear pedir responsabilidades a los responsables de la Junta de Andalucía si no queda claro cuál ha sido el destino del dinero que se presupuestó en esos dos ejercicios para el Materno Infantil de Almería.
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