El Club de Mar denuncia a una extrabajadora por quedarse con 78.000 euros

Una de las entidades sociales más señeras de la capital almeriense, el Club de Mar, ha vivido en los últimos meses un episodio desagradable en relación con su personal . Una de las trabajadoras del staff de administración, concretamente la que era jefa del departamento de Contabilidad desde hacía una década, ha sido acusada de haberse apropiado de una importante cantidad de dinero, concretamente de 78.000 euros, que habrían ido a parar desde las cuentas del club a las suyas personales.

Juicio oral El asunto fue denunciado hace un par de meses por la actual directiva, y están abiertas diligencias en un juzgado de instrucción de Almería por presuntos delitos de apropiación indebida y administración desleal.
Aunque lo cierto es que no dará mucha tarea de investigación a los funcionarios judiciales, ya que la extrabajadora ha reconocido los hechos de que se le acusan y en breve está previsto que se abra la fase de juicio oral, según ha señalado a este periódico el presidente del club, Abelardo Campra.

Los manejos de esta experimentada trabajadora del cuerpo técnico fueron descubiertos a raíz de que la actual directiva, que tomó posesión de sus cargos el pasado mes de diciembre, pidió informes de morosidad y del estado de las cuentas del club. En esos informes se detectaron anomalías, por ejemplo, que algunas facturas de proveedores no se correspondían con consumos reales realizados a lo largo del año en curso.

Hecho aislado
La sustracción de dinero habría sido una cuestión individual, sin la participación de ningún otro miembro de la plantilla de trabajadores de la entidad, según ha asegurado su máximo dirigente. De hecho, Campra Leseduarte aludió de manera indirecta a este asunto  en la memoria del año 2015 presentada a los socios.

“Seguimos teniendo toda la confianza en nuestra plantilla de trabajadores que día a día nos hacen a todos la vida más fácil en las instalaciones, y ello independientemente de que haya que separar a quienes no han tenido la lealtad y honestidad que una entidad como esta y un grupo como el que ellos han conformado, exige a quienes nos prestan sus servicios”, argumentó el presidente a la masa social del club.

Realidad traicionera
“Durante años -añadía- nos han demostrado sus valores y ser merecedores de nuestra consideración, respeto y agradecimiento, y solamente la realidad más dura, traicionera y deshonesta puede y debe hacernos pensar de otra manera”. El presidente finalizaba esta alusión a lo ocurrido con un mensaje de apoyo y confianza al conjunto de la plantilla.

El Club de Mar, con 65 años de historia y unos 5.000 socios, es una entidad privada que gestiona un puerto deportivo con 270 amarres y está enfocada a la práctica de los deportes, en especial los relacionados con el mar, aunque su espectro se ha ido ampliando a lo largo de los años. Tiene un elevado prestigio tanto dentro de la ciudad, como fuera de ella, por méritos deportivos y por su selecto componente social.