La vieja estación del ferrocarril espera soluciones urgentes

La jornada de debate convocada ayer por el Colegio Oficial de Arquitectos y la Mesa en Defensa del Ferrocarril de la Provincia de Almería ratificó la demanda de que la vieja Estación de Renfe se convierta en un edificio protegido y destinado a usos sociales y culturales.

Es la forma de conseguir que este legado irrepetible no pase a engrosar la larga lista de elementos perdidos del patrimonio arquitectónico e histórico de la provincia, con frecuencia sometidos al abandono por parte de las administraciones.

La urgencia
Quizá el elemento más importante del debate, al margen de la ponderación de las cualidades y el valor histórico-artístico del inmueble sea la necesidad, cada vez más acuciante, de acometer tanto los planes para su declaración como bien protegido como para una rehabilitación que se convierte en urgente a la vista del deterioro que se está produciendo en la viaje estación con el paso de los años.

Para los arquitectos y los expertos en historia y urbanismo este edificio, construido en los últimos años del Siglo XIX, es una seña inequívoca de identidad para la capital almeriense y, sin duda, uno de sus argumentos arquitectónicos y culturales de mayor valor, por lo que resulta imprescindible su conservación y también los proyectos para destinarla a usos sociales o culturales que la conviertan de nuevo en una referencia para los almerienses.

Descuido 
Pero más allá de la protección, los ponentes de esta jornada, celebrada en el Círculo Mercantil y que reunió a cerca de un centenar de personas, giró en torno a la importancia de la vieja estación como parte esencial de un eje ferroviario que abarca una amplia zona y que debe incluir, para no romper el conjunto, el acceso al puerto y la unión con el Cable Inglés.

Un debate que puso sobre la mesa las opciones de si debería mantener un uso ferroviario cuando, algú día, llegue la línea de alta velocidad, o bien si el inmueble debe tener una vocación de ‘contenedor’ de servicios culturales, sociales o de otras tipologías.

Varios de los ponentes se inclinaron, de hecho, por mantener la vinculación del edificio con su tradicional uso ferroviario. Ejemplos hay en España de procesos de rehabilitacón compatibles con esos usos y quizá el más destacado sea el de la estación madrileña de Atocha, que ha sido recuperada como edificio, pero sin perder su esencial uso ferroviario.

Concluyen los integrantes de la Mesa y coinciden los arquitectos almerienses en que ya no es posible dilatar más esa rehabilitación y, de forma paralela, las actuaciones técnicas necesarias para evitar primero un mayor deterioro y posteriormente un trataiento que se ha convertido en una urgencia a la vista de su situación actual.

Larga espera
Ayer se daba conocer también el contenido del escrito que la Mesa en Defensa del Ferrocarril de Almería ha remitido al Ministerio de Educación y Cultura para solicitar la declaración de Bien de Interés Cultural para la Estación del Ferrocarril de la capital almeriense.

La Mesa, además de explicar las virtudes que aconsejan la protección del inmueble, y de explicitar el mal estado en que se encuentra, ‘recuerda’ al Ministerio que el expediente para la declaración de BIC se inició en el año 1985, hace ya 31 años, sin que en todo este tiempo se haya avanzado aparentemente en el mismo, a pesar de las reiteradas peticiones de la sociedad civil almeriense y de las presiones que se han sucedido.

Parálisis
Ese expediente fue iniciado originalmente por la Junta de Andalucía pero posteriormente, hace ahora diez años, fue reclamado por el Ministerio de Educación y Cultura sin que ni uno ni otro hayan dictado resolución alguna para la protección.

A la vista de la dilación en el tiempo, la Mesa ha reclamado la reapertura del expediente y la finalización de su tramitación para ser declarada Bien de Interés Cultural. Para ello insta al Ministerio ha realizar los contactos que sean necesarios con la Consejería de Cultura de la Junta para alcanzar un acuerdo por la que la Estación quede desafectada de las competencias del gobierno autonómico.