Los alumnos de Música y Danza “no tienen espacio” para dar las clases

“No somos sardinas, somos bailarinas” o “Queremos aulas, no jaulas” son sólo algunas de las consignas que coreaban este jueves alumnos, padres y profesores de los conservatorios de música y danza en la que es la primera de las concentraciones programadas para exigir a la Junta de Andalucía la reforma del edificio actual.

Y no sólo eso, piden la construcción de un aulario y un auditorio para Música, y un nuevo edificio para el Conservatorio Profesional de Danza en terrenos cedidos por el Ayuntamiento en la Vega de Acá.

Hoy volverán a la calle La manifestación, convocada ayer frente al edificio que acoge a los dos conservatorios (música y danza) junto a la avenida Padre Méndez, reunió a casi 400 personas entre padres y madres de alumnos, los propios estudiantes y algunos profesores. Hoy volverán a reunirse, también a partir de las cinco de la tarde, para bailar y cantar como fórmula para dar a conocer sus “problemas de espacio e inseguridad”, aseguran desde las Ampas de los dos centros.

Más de 1.450 alumnos
El inmueble que acoge a los dos centros educativos suma más de 1.450 alumnos que son los que estudian en el Real Conservatorio Profesional de Música y en el Conservatorio de Danza. Dos infraestructuras educativas que, además de un gran número de alumnos cuenta con casi un centenar de profesores, la mayoría de música.

El edificio se ha quedado “pequeño”, explica Pilar Jerez, vicepresidenta del Ampa Santa Cecilia del Real Conservatorio Profesional de Música. “Tanto es así, que tenemos que utilizar las instalaciones del IES Alborán, casi al completo, todas las tardes, el IES Azcona y el CEIP Padre Méndez. Y eso implica traslado de niños, pérdida de tiempo de clase y, además,problemas de seguridad porque tienen que ir de un lado para otro”. 

“Son problemas  muy graves”, resume esta representante de padres y madres de alumnos, que reconoce cómo en esta petición de mejores instalaciones, todos (alumnos de música y de danza) van “a una”. Insistir e insistir en una queja que es una demanda de algo que entienden “justo” y “nada extraordinario” es la fórmula que van a seguir las Ampas, cuyos representados piden “lo mismo que ya tienen los alumnos de música y de danza del resto de provincias andaluzas”.

Seguirán manifestándose
Tienen previsto continuar con las reivindicaciones “todas las tardes” hasta que representantes de la Junta de Andalucía en la provincia se pongan en contacto con ellos para empezar a dar pasos hacia un nuevo conservatorio de danza y para la reforma del de música. “Si nos empeñamos, lo conseguimos”, entiende Lola Moya, que es presidenta del Ampa Santa Catalina del Conservatorio de Danza. 

Los problemas de quienes estudian danza son enormes por la falta de espacio. “Son apenas 20 metros cuadrados para 25 alumnos”, explica Moya, que hace hincapié en que los alumnos “tienen que salir a los pasillos para practicar saltos”. “No pueden ni levantar los brazos sin chocarse unos con otros o sin darse con las columnas. Esto no es enseñanza de calidad ni condiciones dignas”, resumen los padres y madres.

Respuesta de la Junta
La realidad de estos alumnos y sus padres es conocida por los representantes de la Junta en Almería. Ayer mismo, la delegada Gracia Fernández explicaba a los medios de comunicación que la “Consejería de Educación de la Junta de Andalucía hace una planificación con prioridades” y “en el momento en el que haya presupuestos disponibles, se harán las obras necesarias en el conservatorio”.

“Por supuesto -insistía- queremos apoyar a la formación de música, pero tiene que ir con prioridades que establece la Consejería”, decía.