El acusado del crimen de la patera: "el mar arrastró a los seis muertos"

Alain N. B. entró en la sala de vistas de la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Almería con las manos engrilletadas y escoltado por dos agentes de la Policía Nacional. Ocupó una silla en el centro de la habitación frente a los nueve miembros del jurado popular y, asistido por un intérprete, relató en francés su versión sobre aquella madrugada de diciembre en alta mar.

El único acusado de las seis desapariciones en la “patera de la muerte” (el segundo acusado murió en la cárcel antes del juicio) niega su participación en los hechos. El camerunés Alain N. B. rechaza las imputaciones de los cuatro testigos, recogidas en los informes de la Policía Nacional de Algeciras, y afirma que los viajeros cayeron al mar por el fuerte oleaje que zarandeó la patera la noche del 4 al 5 de diciembre de 2014.

“Desde que estoy en la cárcel tengo la conciencia tranquila y no he tomado pastillas para dormir. He visto a otras personas en la cárcel que han matado y toman muchos tranquilizantes para dormir”, afirmó el acusado en la sesión del martes, en declaraciones citadas por la agencia Europa Press.

La Fiscalía pide 90 años de cárcel por seis delitos de homicidio y cree que Alain N. B. atacó a sus compañeros de embarcación con unos tablones del fondo de la lancha. Las presuntas agresiones se habrían producido tras tres días perdidos en el Mar de Alborán y sometidos por el temporal. Los inmigrantes católicos, dirigidos por un pastor, comenzaron a rezar y, según la acusación, Alain N. B. los culpó de la mala suerte.

Católicos y musulmanes Según expuso el fiscal en el inicio del juicio con jurado popular, “a los que llevaban unos cinturones de seguridad espiritual les dieron un golpe en la cabeza y los arrojaron al mar”. Los agresores eran musulmanes y las víctimas católicas, alega.

Sin embargo, Alain N. B. se confiesa también cristiano católico y acude regularmente a misa en el centro penitenciario de El Acebuche. Aunque reconoce la tensión durante la travesía en la patera tras tres días de navegación desde Marruecos, rechaza agresiones a los ocupantes. “No maté a nadie, no tiré a nadie al agua ni registré a nadie”, insistió. Además, desestima la versión sobre los tablones del fondo de la embarcación. “Nadie arrancó el fondo de la zódiac;  es imposible que se arranque algo que te va a salvar la vida”, argumentó.

Desaparecidos
El juicio se prolongará durante toda la semana en la Sección Segunda de la Audiencia de Almería. La única prueba de cargo es el relato ofrecido por cuatro testigos rescatados por la Guardia Civil en la patera el 5 de diciembre de 2014. Los 23 supervivientes restantes no culparon a los dos detenidos como autores de los crímenes y, además, se encuentran actualmente ilocalizables.

Además, el fiscal admite la dificultad para identificar a los fallecidos. “Es cierto que  no hemos encontrado los cuerpos, el mar se los tragó, y que ni siquiera podemos decir sus nombres”, explicó en su exposición inicial a los miembros del jurado.

Los equipos de rescate sólo hallaron el cuerpo de un varón frente a las costas de Motril (sin signos de violencia) unos días después del suceso. Se desconoce si pertenecía a la misma patera.