La saturación de los centros de internamiento obliga a dejar en libertad a 50 argelinos

La Policía Nacional agotó el plazo legal de 72 horas sin encontrar espacio libre en ningún centro de país 

Patera con parte de los argelinos liberados (foto de Salvamento)
Patera con parte de los argelinos liberados (foto de Salvamento)
Javier Pajarón
22:54 • 06 oct. 2016

La saturación de los centros de internamiento de extranjeros (CIEs) y las exigencias legales obligan a la Policía Nacional a poner en libertad a medio centenar de ciudadanos argelinos rescatados en pateras en el Mar de Alborán. 




La Brigada de Extranjería y Fronteras de la Comisaría Provincial de Almería ha agotado el plazo legal de 72 horas de retención de los inmigrantes irregulares sin encontrar espacio en ninguno de los siete centros disponibles en España y, en contacto con el juez de instrucción, ha dejado en libertad a los magrebíes.




Los varones permanecían vigilados en los módulos de custodia temporal del Muelle de Poniente tras dos operaciones de rescate de Salvamento Marítimo en el Mar de Alborán. Los agentes iniciaron los trámites por una infracción a la Ley de Extranjería y solicitaron su envío a los CIEs como paso previo para la expulsión a Argelia, país con acuerdo bilateral para la repatriación de inmigrantes irregulares.




Sin embargo, la llegada de pateras de los meses de septiembre y octubre ha colmado el sistema y los argelinos han quedado en libertad con un expediente de expulsión que, en la práctica, será difícil de ejecutar. 




El propio comisario jefe provincial, Adolfo Castaño, ya alertó el martes de los problemas derivados de la gestión de todos los inmigrantes irregulares rescatados en las costas de Almería en los últimos días. Además, los sindicatos policiales también han mostrado su malestar por la falta de recursos. Tras un mes y medio de crisis, la situación de los centros de internamiento terminó por explotar. 




Problemas
Hay dos consecuencias directas. La primera es la inutilidad de todo el trabajo previo de las fuerzas de seguridad en la lucha contra la inmigración irregular que, entre otras cosas, obliga a dedicar parte de la plantilla de la Policía Nacional a vigilancias y traslados invalidados unas horas después por la puesta en libertad.




Y, en segundo lugar, genera problemas de seguridad con personas sin recursos, sin comida, sin techo, sin conocimientos de español y, a menudo, sin ningún contacto en Almería. Algunos de los inmigrantes caminaban por el parque Nicolás Salmerón y el entorno de la Estación Intermodal en Almería con bolsas de la Cruz Roja.




En España hay siete CIEs disponibles, algunos rodeados de cierta polémica por las denuncias de organizaciones sociales. La Ley de Extranjería permite mantener a los ‘sin papeles’ en centros de custodia durante un máximo de 60 días a la espera de su repatriación a los países de origen. No han cometido ningún delito, pero sí una infracción administrativa que impide a priori su libre circulación.


Almería cuenta únicamente con unos módulos de atención temporal, gestionados por la Policía Nacional y atendidos por Cruz Roja (asistencia humanitaria). La instalación del Muelle de Poniente dignificó la estación (hasta 72 horas) de los inmigrantes que antes se hacinaban en un antiguo cocedero de marisco en el puerto (hubo fugas e incidentes por las condiciones insalubres de aquellas dependencias).


En el último año, la Policía Nacional puso en marcha, en colaboración con la Junta de Jueces de Almería, un sistema de videoconferencia para minimizar los traslados desde el Puerto de Almería a los juzgados, precisamente para mejorar la seguridad. 



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