La Legión se sumará en noviembre a dos misiones contra el yihadismo

La Brigada de la Legión afrontará a partir del próximo mes de noviembre dos nuevas aventuras en el exterior. Los militares dirigidos desde la base Álvarez de Sotomayor nutrirán el grueso de los contingentes desplazados a Irak y Mali para formar a las tropas locales en la lucha contra los yihadistas. Los legionarios iniciarán el periodo de formación (conocido en el argot como “4+2” por los meses dedicados al adiestramiento) en primavera y asumirán el relevo de las tropas españolas que, previsiblemente, inicien su despliegue entre abril y mayo.

España participa en la Operación Inherent Resolve en Irak desde 2014 en el marco de un contingente internacional formado por 60 países. Los enemigos son los yihadistas de Daesh (autodenominado Estado Islámico) que operan en buena parte del país y, en menor medida, los grupos armados afines a Al-Qaeda. La Legión tendrá su centro de operaciones en la base de Besmayah, al sureste de la capital Bagdad, lejos del muy conocido frente de Mosul, situado en el norte del país y protagonista de durísimos enfrentamientos en las últimas semanas. 

Los legionarios cuentan con experiencia en Irak. Ya estuvieron en la zona en 2003 y 2004 dentro de la coalición internacional surgida tras aquel Pacto de la Azores, y más recientemente en 2015 con parte clave en el adiestramiento de las tropas iraquíes para la lucha contra el Daesh. En último contingente fue liderado por el coronel Julio Salom y contó con el público reconocimiento de las instituciones. El Grupo de Regulares de Melilla partió a finales de octubre hasta Irak y nutre un contingente español formado por unos 300 soldados. A la espera de un diseño más preciso del operativo, la Legión debería aportar cifras similares a partir de noviembre.

Regreso a África
Por otra parte, los legionarios volverán a tomar posiciones en la base de Koulikoro en Mali en misión de adiestramiento. Las milicias yihadistas rebeldes han ganado grandes zonas del norte del país aprovechando la dureza del territorio del Sahel. A petición del gobierno maliense y sobre la base de resoluciones de la ONU en 2012, una coalición internacional encabezada por Francia ayuda a los soldados locales. La misión cuenta actualmente con la participación de 26 naciones y el mando actual está en manos belgas. La Legión estuvo en una primera fase y aportó luego un grupo reducido en el penúltimo relevo en 2016.  En la actualidad permanecen desplegados en zona alrededor de 110 militares españoles, una orientación del posible contingente legionario.

Ahora bien, los detalles se perfilarán en los próximos meses, incluido la confirmación de la misión y las fechas finales, siempre sometidas a los posibles cambios de estrategia y a los acuerdos internacionales.