Policías nacionales salvan a dos jóvenes polizones de morir ahogados tras saltar desde un ferry

Una acción heroica de un agente de la Brigada de Seguridad Ciudadana de la Policía Nacional salvó a dos jóvenes magrebíes de morir ahogados entre las piedras del denominado Dique de Pechina, ubicado en la parte exterior del Puerto de Almería. Los chicos tienen 19 y 16 años de edad, son marroquíes y viajaban como polizones en el buque Vronskiy de Acciona Transmediterránea procedente de la ciudad africana de Nador.

Sobre las 7.30 horas del martes, los jóvenes se lanzaron al mar cuando el ferry afrontaba las maniobras de atraque en la terminal internacional del Puerto de Almería. Los polizones pretendían alcanzar tierra a nado y esquivar los controles realizados por la Policía Portuaria, la Guardia Civil y la Policía Nacional antes de superar la frontera española. Sin embargo, el plan se torció y los jóvenes se refugiaron a duras penas entre las piedras del Dique de Pechina.

Una alerta movilizó a agentes de la Policía Nacional de Almería en la búsqueda de los polizones. Tres vehículos patrulla tomaron posiciones en las dársenas, mientras el Grupo de Actividades Subacuáticos (GEAS) de la Guardia Civil se preparaba para una intervención de emergencia.

Con el agua al cuello
Unos minutos más tarde, los policías hallaron a los muchachos entre las rocas, en el interior de un tubo de un metro de diámetro, parte de la estructura del dique (la construcción cuenta con tubos instalados para dar solidez con un relleno de arena, aunque algunos permanecen vacíos y conectados directamente con el mar).

La situación era extrema. Los agentes descubrieron a los polizones literalmente con el agua al cuello, atrapados, atemorizados y con la amenaza de un inminente ahogamiento en el interior de la canalización. No esperaron a la llegada del GEAS. Un agente se quitó el uniforme y lanzó a una peligrosa misión de rescate, a riesgo de su propia integridad. El policía nacional, auxiliado por sus compañeros, se introdujo en el tubo del dique y sacó a los chicos en situación muy precaria.

Un chico vestía un traje de neopreno, muestra del plan  diseñado para saltar del ferry a su llegada al Puerto de Almería. Mientras, el segundo polizón tenía como único objeto personal sus calzoncillos. No necesitaron asistencia médica. 
Fueron trasladados a la Comisaría de la Policía Nacional de Almería, donde coincidieron con el delegado del Gobierno en Andalucía, Antonio Sanz, que visitaba las instalaciones de Extranjería.

La llegada de polizones en los buques procedentes de Marruecos ha crecido notablemente en los últimos dos años y, por ende, ha provocado nuevos retos para la seguridad en el Puerto de Almería. Estos viajeros son marroquíes, a veces muy jóvenes, se ocultan entre el pasaje para saltar la valla del puerto o entre la estructura de camiones y coches. En los casos más extremos saltan desde el ferry para alcanzar la playa de San Miguel a nado.