Juan Murcia: "Toca pasar de la filosofía a la práctica y dar el paso en el puerto-ciudad"

Tras ocho años Juan Murcia se marcha de la presidencia del Colegio de Aparejadores y Arquitectos Técnicos. Lo hace tras mucho trabajo en defensa de su colectivo en plena época de una crisis que ha sido dura para ellos.

¿Qué balance hace de su mandato? Le ha tocado lidiar con la crisis.
Durante estos ocho años hemos sido capaces de mejorar y seguir prestando todos los servicios que necesita nuestro colectivo, y todo ello optimizando los recursos. Se ha intensificado nuestra presencia en las instituciones y en la sociedad, además de actualizarnos en esta época digital y formándonos contínuamente. Estos logros son fruto del trabajo colectivo tanto de la Junta de Gobierno como del personal del Colegio y por supuesto del apoyo de nuestros colegiados que han seguido perteneciendo a él conscientes de que en los momentos difíciles se hace necesario más que nunca estar unidos.

Empecemos por el principio. ¿Cuál es la labor del arquitecto técnico?
Somos los profesionales expertos en edificación. Conocemos todo el proceso edificatorio, lo que nos permite coordinar sus fases y aplicar de manera independiente los controles que garanticen su calidad, seguridad y sostenibilidad. Este conocimiento integral del ciclo de vida del edificio es nuestra seña de identidad.
Dada nuestra formación académica, somos capaces de desarrollar multitud de funciones dentro del proceso edificatorio, tales como gestionar, asesorar, llevar a cabo la dirección de ejecución material de las obras, coordinar la seguridad y salud de la construcción, proyectar, valorar o tasar inmuebles, realizar certificados de eficiencia energética e informe de evaluación de edificios entre otras.

Una de las principales misiones ha sido la defensa de la profesión y de las competencias ¿Colaboran las administraciones?
Desde el Colegio Oficial de Aparejadores y Arquitectos Técnicos entre las acciones más importantes en las que hemos venido trabajando en estos años, ha sido la defensa de la profesión como colectivo, que necesita que la administración la respalde y la defienda ante el  intrusismo profesional. De esta forma, lo que respaldamos, es que el ejercicio de la profesión se haga desde la perspectiva de la calidad que supone la colegiación desde la deontología profesional a los seguros. Ante esta situación, la administración debe apoyar nuestras propuestas y legislar en consonancia con ellas. 

El futuro pasa por la formación y por el BIM.  Retos a partir de ahora.
La formación forma parte de nuestra profesión. Tenemos un abanico tan amplio de competencias, y que en cada una de ellas se dan continuamente cambios (en las normativas de aplicación, en las tecnologías empleadas, y hasta desde el punto de vista de la demanda social), que estamos totalmente acostumbrados a enfrentarnos a la actualización y al reciclaje continuo, y que por otra parte, nos mantiene activos y en plena evolución en nuestro trabajo diario, siempre buscando nuevos materiales, soluciones constructivas innovadoras. El BIM es el presente y el futuro para nuestros profesionales, se trata de una nueva metodología de trabajo en el que se obtiene una mejor información en tiempo real del proceso constructivo y durante todo su ciclo de vida. En cuanto a los retos de futuro, entiendo que continuar y profundizar más en todas las áreas del conocimiento y de la formación.  

Participan dentro de varios foros y consejos vinculados con la sociedad a, pero ¿cree que son lo suficientemente conocidos?
Nunca se es lo suficientemente conocido. El Colegio de Aparejadores hace una labor importante en dar a conocer la profesión colaborando con todas las administraciones e instituciones en las que tenemos algo que aportar. 
El colegio cuenta con un Servicio de Atención al Ciudadano para resolver las consultas y dudas de los consumidores, solicitud de técnicos para la realización de trabajos profesionales, información sobre las atribuciones profesionales de los colegiados, orientación referente a la tramitación de reclamaciones y sugerencias, entre otras cuestiones. Colaboramos activamente en la elaboración de un Plan de Riesgos Sísmicos en nuestra ciudad y en la Mesa del Ruido del Ayuntamiento de Almería, colaborando también con diferentes asociaciones.
Nunca es suficiente, y mientras quede un ciudadano que no conozca cual es la labor de un Arquitecto Técnico y en todo lo que le podemos ayudar, siempre habrá trabajo de difusión por hacer. 

La ciudad está en pleno proceso de aprobación del Plan General desde hace 13 años, pero mientras las viviendas envejecen. ¿Se toman en serio la necesidad de realizar el IEE?
El Informe de Evaluación de los Edificios (IEE) es tan importante como la ITV de los coches, nos garantiza que, aunque una edificación sea antigua (ya que solo es obligatorio para los edificios con más de 50 años), ésta goza de las condiciones de seguridad, estabilidad y habitabilidad que nos aseguran la tranquilidad de su ocupación. 
Con esta inspección técnica podemos, además, detectar pequeños problemas incipientes y que con una mínima inversión devuelven al edificio sus condiciones idóneas de uso, sin tener que lamentar en poco tiempo desperfectos mayores ni grandes gastos indeseados. 

Precisamente en esta tramitación ¿hacia dónde cree que debería ir la ciudad? ¿Apuesta más por la rehabilitación o por el crecimiento?
Ambos han de estar en consonancia con las demandas de la sociedad, entiendo que se debe potenciar la rehabilitación sin limitar el crecimiento de la ciudad, para lo cual se hace necesario por parte de las administraciones la aprobación definitiva del PGOU que a mi juicio es una de las asignaturas pendientes más importantes.
No cabe duda, respecto al parque edificado del que disponemos, que ha de mantenerse y rehabilitarse, ya que la vida útil de un edificio puede superar los 100 años y es muy deseable que estas edificaciones vayan mejorándose y adaptándose a los cánones de calidad que se les van pidiendo a las nuevas edificaciones, que hagan que la ciudad existente sea atractiva y deseable para las nuevas generaciones.

Una rehabilitación integral, supongo.
Efectivamente. Creo que el Plan General debe apostar por una ciudad compacta y por la rehabilitación  integral que pasa desde la accesibilidad a la eficiencia energética. Hay que poner en valor la ciudad que ya está consolidada, por supuesto sin renunciar a los nuevos crecimientos.

Se supone que la llegada de los Fondos Edusi tienen que servir de hecho para regenerar algunos barrios.
Lo importante es que sean capaces de materializar los proyectos. Cuando se abren programas para la rehabilitación el problema es que se quiere abarcar tanto espacio que hace muy complicado hacer una ejecución integral. Quizá sería más recomendable el realizar una zonificación de la ciudad y planificar los tiempos. Así que cada año se decidan las zonas en las que se va a actuar y de esta forma que regenerarían barrios completos dejándolos casi como nuevos.

¿Estas medidas podrían entrar en el Plan Estratégico que está en elaboración por el Ayuntamiento?
Entiendo que sí, lo ideal es que el Plan Estratégico lo abarque todo ya que lo primero que hay que poner en valor es la ciudad consolidada porque si uno de nuestros puntos fuertes es el turismo, tenemos que analizar qué le vamos a enseñar. 

Volviendo al Plan General, ¿entiende la gente la importancia de que se apruebe?
El PGOU es la gran asignatura pendiente pero es cierto que a la ciudadanía en general no le interesa porque no se ha sido capaz de mostrarles su importancia. Es absolutamente necesario  para que pueda llegar inversión a medio plazo ya que necesitan que haya seguridad jurídica. Por ejemplo, actualmente el suelo industrial de la ciudad está agotado. Hay determinadas zonas como todo el espacio industrial de Sierra Alhamilla o del sector 20 que se traslada en el PGOU diseñado y que no podría hacerse si al final hay que optar por una adaptación del actual a la LOUA, que es sobre lo último que están trabajando.

Parece que el próximo reto es el desarrollo del puerto-ciudad.
Pasa lo mismo que con el soterramiento y el PGOU, llevamos muchos años hablando, de hecho hemos llegado a formar parte de una comisión de trabajo. Lo cierto es que en este tiempo no ha habido un gran acuerdo de hasta donde tiene que llegar, no había colaboración de las administraciones, algo que ahora parece que si están apostando más por ello. 
Lo importante es pasar de la filosofía a la práctica porque no se avanza lo suficiente. Entiendo que sí es uno de los grandes retos de futuro, que se concrete con estándares de calidad que permita abrir la ciudad al mar.

Y la última. Ustedes también velan por el patrimonio, ¿cómo ven la situación de la ciudad?
Es necesario que se involucren todas las administraciones. Actualmente hay ayudas a la rehabilitación de edificios, pero es cierto que es necesario que se involucren desde la Consejería de Cultura que es la encargada de realizar el Catálogo de Bienes Protegidos, así como el resto de las instituciones. Desde el colectivo defendemos que hay que actuar sobre esos edificios de la ciudad.