“¿Podría funcionar un banco sin dinero?” Es la pregunta que muchos se han planteado en los últimos años de crisis económica. La respuesta es sí: es posible canjear servicios sin gastar ni un solo euro. Un ejemplo de ello son los llamados 'bancos del tiempo'.
En estas plataformas el tiempo se transforma en moneda de cambio y la hora se convierte en la unidad de medida. La idea es sencilla: dedicar el tiempo propio a los demás y recibir el de otras personas como compensación.
En Almería existe, desde hace cinco años, un banco del tiempo vinculado a los centros de la mujer. Toda persona mayor de edad que resida en la provincia puede inscribirse. Los servicios propuestos pertenecen a distintas categorías, como la mejora del currículum, el asesoramiento en distintas áreas, la ayuda con tareas domésticas, el bricolaje, la salud y el bienestar, la atención a personas, la belleza o la formación.
Propuestas variadas
Las prestaciones van desde la práctica de idiomas o las clases de cocina e informática al cuidado de plantas y animales o a hacer la compra, pasando por el asesoramiento jurídico, el acompañamiento a espectáculos o la simple conversación.
“Aunque no es otra cosa que el trueque de toda la vida, se ha configurado como un sistema equitativo y práctico”, explica Pilar Ortega, concejala del área de Familia e Igualdad de Oportunidades. Junto a Chelo García, responsable del proyecto, ha presentado la decena de actividades que acompañarán la celebración del quinto aniversario del banco del tiempo el 20 de octubre en la Guajira (Almería).
De julio a diciembre, habrá tanto visitas guiadas como jornadas de convivencia y naturaleza y el ‘club de los viernes’ servirá para compartir experiencias semanalmente.
Los interesados pueden contactar con el Centro de la Mujer 'Cortijo Grande' (en el teléfono 950 21 00 73) o a través del correo electrónico ([email protected]).
Más información en la página web del proyecto.
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