Domingueros y vándalos afean el estado de las playas de Almería

Las playas almerienses están sufriendo la falta de civismo de unos pocos y que acaban perjudicando a los muchos que quieren disfrutarlas y cuidarlas. Esta falta de civismo se traduce en actos de vandalismo en los servicios ubicados en el litoral de la capital, en la presencia de basura en la arena en cualquiera de sus playas, o en las ‘huellas’ que dejan en pleno parque natural en forma de papel higiénico en las cunetas de la carretera. Y es que mientras la gran mayoría de almerienses y visitantes apuestan por ir a las playas a disfrutar o bien de los servicios o bien de la belleza de un paraje natural incomparable, hay algunos que sin pensar en las consecuencias de sus actos, dejan lleno de basura un espacio que es de todos, o sin servicios unos aseos que se tienen que arreglar con el dinero de los impuestos que todos estamos obligados a pagar.

Vandalismo
Según explicaba ayer el concejal de Fomento, Comercio y Playas, Carlos Sánchez, los actos vandálicos han llevado a que solamente unos días después de poner una nueva barandilla de hormigón en el paseo marítimo de Retamar “algunos han hecho saltar los anclajes, movido su estructura, con el peligro que conlleva”. Además de este daño a la barandilla, se suman otros como “la rotura o sustracción de elementos como grifería, tubos fluorescentes, incluso, los asideros de baño para personas con movilidad reducida”, necesarios para la prestación de servicios que demandan los usuarios de las playas,  Para el edil popular, en el caso de las playas, “la falta de civismo de unos pocos afecta a una gran parte de sus usuarios, lo que además supone un importante daño a la imagen de la ciudad, siendo las playas uno de los principales atractivos en estas fechas”.

En el caso de las playas del parque natural, las críticas llegan principalmente de los vecinos de Cabo de Gata, La Almadraba de Monteleva y La Fabriquilla ya que en muchos casos al tratarse de playas naturales y no contar con servicios de aseos, la gente decide hacer sus necesidades entre los coches que se encuentran aparcados en la orilla de la carretera. Cuando se marchan dejan allí los restos no solo de sus deposiciones, sino de los papeles que han utilizado, lo que genera una imagen de suciedad en la zona a la vista de todos aquellos que circulan por esa carretera.

Propuesta
Pedían los vecinos de esta zona del parque natural con la imagen de  “la recta de Cabo de Gata que amanece cada día con restos de botellas, latas papeles, basuras al antojo de cada uno , sumado a la falta de limpieza de la zona del margen de la carretera( no de la parte de la playa)” hacer una llamada de atención para la colaboración de todos en su cuidado ante la “imagen tan dañina” que cada mañana se puede ver al circular por esta vía.
Todo depende de la concienciación ciudadana, que a veces deja mucho que desear.