"Más rigor" en los controles fronterizos de la provincia

Agentes de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad han realizado durante los dos últimos meses en el Puerto de Almería, en el periodo comprendido entre el 15 de junio y el 15 de agosto, controles exhaustivos de los pasajeros y vehículos que han cruzado el Mediterráneo con destino a los puertos de Orán y Gazahuet en Argelia, Nador en Marruecos y la ciudad autónoma de Melilla en el operativo Paso del Estrecho de este verano.

Según señaló el subdelegado del Gobierno, Andrés García Lorca, la vigilancia, que ha sido más exhaustiva que en años anteriores, ha tenido “resultados espectaculares”. “En el marco de la OPE hemos detenido a delincuentes buscados a nivel internacional”, afirmó. El representante del Ejecutivo central en Almería reconoció, sin embargo, que la “avalancha constante” de pateras ha distorsionado la labor del control en el Puerto. “Nos hace distraer a muchos efectivos”, aseveró.

Hasta el pasado mes de julio, el centro de coordinación de Salvamento Marítimo había rescatado en aguas de Almería a 4.295 inmigrantes en 153 pateras. La cifra es la más elevada de todo el global andaluz.

García Lorca apuntó que los diversos controles que se han llevado a cabo han causado algunas demoras en el embarque de pasajeros. “Comprendo que en algunos servicios públicos haya habido retrasos porque se han incrementado los niveles de control y seguridad”, dijo, para añadir que se seguirá trabajando “al mismo ritmo” en la operación retorno. En dos meses, por el Puerto de Almería han pasado casi 260.000 personas y cerca de 60.000 vehículos. Esas cifras suponen un 21,5% y un 29% más que el año pasado, respectivamente.  

Los datos están llevando a la Subdelegación del Gobierno a plantearse cambios para el año que viene. Según ha podido conocer LA VOZ DE ALMERÍA, se bajara ya un dispositivo de control más complejo que el actual que abarque el incremento paulatino e incesante de pasajeros que se produce cada año y para vigilar mejor a los vehículos. 

Más coches
Este año, por ejemplo, se ha observado que el modelo de tráfico ha cambiado y que ha habido más coches y menos camiones y furgonetas que en otras ediciones de la Operación Paso del Estrecho. 
Esta circunstancia ha hecho que las inspecciones se hayan demorado más tiempo, de ahí los retrasos que se han producido en el acceso a los ferrys.