Antonio López Olmo: "Teruel parece solo un delegado de Susana Díaz en Almería"

No es un recién llegado a la política. Suma más de dos décadas de experiencia y cargos públicos en Huércal-Overa,  a nivel provincial y como diputado nacional, un bagaje que no le impide presentarse como ‘lo nuevo’. 

¿Por qué quiere liderar el PSOE provincial?
Como fin último, para ganar las elecciones al PP y cambiar las políticas en nuestra provincia. Por otro lado, quiero un partido diferente, con los cambios de funcionamiento que ha traído el 39 congreso y el liderazgo de Pedro Sánchez que básicamente son el empoderamiento de la militancia, que va a ser quien a partir de ahora tome las grandes decisiones del partido, no como hasta ahora que era el secretario general, y la rendición de cuentas agrupación por agrupación.

¿Quiere decir que la política y acción de la actual dirección sería incapaz de ganar nunca al PP?
A las pruebas me remito, llevamos más de una década sin ganar ni una elección de ámbito provincial al PP, con diferencias entre los 30.000 y 50.000 votos. Creo que es un proyecto agotado y creo que la ilusión que ha traído el 39 congreso está siendo un incentivo, especialmente para los jóvenes, que han vuelto a mirar al PSOE. Y una idea transversal de la que hemos carecido en los últimos años: el Poniente es una comarca importantísima, allí viven más de 200.000 personas, y tiene que estar presente en la vida política provincial junto a la capital, junto al Levante, junto a los pequeños pueblos. El Poniente ha sido uno de los olvidados. 

¿Qué opciones reales tiene de conseguir los avales?
Los datos que recibo día a día de los municipios me hacen ser optimista, pero, desde luego, es un reto difícil conseguir en torno a 1.100 firmas, con nombres, con apellidos, con DNI…

¿Ha sido un palo en las ruedas imponer el 20%?
No contar con cargos institucionales apenas entre las personas que me apoyan lo hace más dificultoso. Creo que con esfuerzo sí que lo vamos a conseguir. Pero yo sigo pensando que lo importante es el voto secreto y en urna. Pedir un 20% de avales que es lo que han pedido los otros dos precandidatos, simplemente es un deseo de coartar la participación,  cuando en verdad el 39 congreso permite entre el 3 y el 6% de avales,  mejoraría la participación e iríamos a una segunda vuelta que en términos democráticos, se sustentaría mejor. 

¿Le consta que haya presiones para los avales?
Yo no le llamaría presiones, le llamaría que ellos aconsejan desde su punto de vista institucional un voto. Mi presión es puramente ideológica. Pero con concreción a la pregunta, sí, me consta, porque cuando he ido a pedir el aval a algún centro de trabajo de la Junta de Andalucía pues ya había habido llamadas previas.

¿En qué zonas detecta más apoyo y en cuáles más dificultad?
Bueno es difícil, aún no tengo datos concretos. 

Se puede regir en parte por lo que pasó en las federales con los avales a Pedro Sánchez. 
Bueno, así es, pero también está habiendo un trasvase de votos. En la capital obtuvimos un buen resultado, en Roquetas, en Huércal- Overa, en Pulpí, en Dalías ya has sido testigo [mientras hablaba con esta periodista le llegó la noticia de un importante respaldo]. Luego, con mucha menor población, pero con mucho ánimo la Alpujarra y el Medio Andarax. Y más dificultades en las agrupaciones donde los otros candidatos, sobre todo Juan Carlos, llevan años trabajando por consolidar un proyecto. 

¿Tiene la capital la llave?
La capital tiene 900 militantes, casi una quinta parte de la militancia total. Es de las agrupaciones decisivas en casi cualquier proceso. 

Si López Olmo representa el pedrismo o sanchismo…  Por cierto, ¿ustedes cómo lo llaman?
No tenemos ni nombre ni apellidos, somos la candidatura por una regeneración en el PSOE. Esa regeneración se inició con Pedro Sánchez, pero una vez concluida la elección de Pedro y la de Susana Díaz en Andalucía, nosotros somos una candidatura por la militancia de la provincia de Almería. 

Pero se identifican más con Pedro Sánchez. 
Evidentemente la base de nuestra acción son las resoluciones del 39 congreso, aprobadas por una amplísima mayoría de militantes a nivel nacional, y que son de obligado cumplimiento. Lo que hay que hacer ahora es trasladarlas a la provincia agrupación por agrupación. 

Bien, si están próximos al pedrismo, y Sánchez Teruel es el susanismo, ¿qué es entonces Pérez Navas?
Primero tengo que decir que son muchas más las cosas que nos unen a los tres como socialistas que las que nos separan. Pero, en este caso concreto de los avales, ellos han optado por la antigua política, apuestan por una forma de partido que está en retroceso, y yo apuesto por lo nuevo, por una forma de funcionar más democrática, en contacto directo con la militancia. Las similitudes entre ellos son muchísimo mayores que con el proyecto que yo represento.

¿Pérez Navas es otra versión del susanismo?
Evidentemente la persona que ha sido secretario de organización durante los últimos cinco años y que además en el último comité provincial se manifestó por una forma de funcionar antigua está dentro de lo que se ha dado en llamar susanismo. Bueno, tampoco creo que esos nombres y esos apellidos sirvan para identificarnos porque cuando se quiere preparar un proyecto para Almería, tienes que contar con la secretaría general a nivel andaluz, como con el secretario general federal y, por tanto, hay elementos de cohesión, pero siempre desde la exigencia a las políticas que se vayan a aplicar. 

Si no consiguiera los avales, ¿pediría el voto para alguno de los otros dos?
Es un escenario que no contemplamos, porque el recuento de avales hasta ahora me indican que va bien. Yo no puedo pedir el voto para ellos porque significan un modelo muy diferente al que yo represento. Evidentemente quien más fácil lo tiene es Sánchez Teruel, porque él representa el aparato del partido, y Juan Carlos supongo que se estará encontrando con los mismos impedimentos que estoy teniendo yo. 

Otra hipótesis. Consigue los avales y gana las primarias, ¿integraría a los demás?
Con un 40 ó 45%, que es probablemente el porcentaje de votos que tendrá el ganador, no se puede hacer una ejecutiva provincial, porque una estabilidad tiene que estar sustentada en al menos el 70 ó el 70 y mucho por ciento de la militancia. Necesariamente habría que hacer una integración pero en base a la aceptación de las resoluciones del 39 congreso. A partir de ese momento, con un secretario general electo, hay personas de gran valía en los dos equipos, pero fuera de las dos personas que encabezan, y esto tiene que quedar claro.

¿Su opción se define más por ser antisusanista que pedrista?
En modo alguno. Nosotros con la secretaria general de Andalucía queremos mantener una colaboración estrecha, pero lo que no va a pasar es una relación basada en que el secretario general de Almería sea un delegado de la secretaría general andaluza. El secretario de Almería tiene que tener la independencia que le da el ser votado por su militancia, y tiene que hacer posicionamientos en pro de lo que Almería necesita. 

¿Es Sánchez Teruel solo un delegado de Susana Díaz?
A veces da esa impresión cuando hablas con alcaldes, con concejales, con la militancia. Nosotros lo que queremos es colaboración estrecha, pero tener la capacidad que tienen otras provincias de pedir lo que nuestra provincia necesita, desde la colaboración, por supuesto, y desde el respeto institucional, pero también con la fuerza que da el ser elegido directamente por la militancia. 

¿Quiere decir que Sánchez Teruel actúa más en función de su posicionamiento orgánico que del interés de Almería?
Yo lo que digo es que nuestra vinculación no va a ser en este caso formar parte de una estructura, la del partido a nivel andaluza, sin que haya exigencia. Almería necesita acción política desde la propia provincia para tener un peso específico propio, en los últimos años no ha sido así, por eso se plantea esta alternativa.

¿Le buscaron para estar al frente de esta opción o la buscó usted?
Hubo varias reuniones, ni yo me posicioné ni me lanzaron, sino que en una de esas reuniones hubo varias voces que dijeron que quizá yo sería la persona que podría encabezar esta forma de entender la política en el PSOE. Pero esto viene de bastante atrás. 

¿Está Pedro Sánchez al tanto de cómo se están desarrollando las candidaturas en Andalucía?
Yo hace varios meses que no hablo con él. Sé que él estará informado porque Fernando Martínez, que es uno de mis principales apoyos, está en la Ejecutiva Federal.

¿Tiene en la cabeza una idea de Ejecutiva en el caso de que ganara?
Por supuesto, porque a eso le estoy dedicando la mitad del tiempo…

¿Tiene nombres?
Nombres quizá es un poco precipitado todavía pero sí tengo una estructura. El partido necesita una secretaría de organización potente, que en exclusiva se dedique a coordinar todas las agrupaciones locales. 

No acumular cargos. 
Eso es lo que hay que comprender que viene nuevo. Como te digo, quiero una secretaría de organización con plena dedicación. Quiero separar política municipal y política institucional. La política municipal tiene que estar atentísima a las necesidades de nuestros alcaldes y concejales. Yo quiero una secretaría de política institucional que apueste por la relación con los sindicatos, coordine la acción política de los delegados de la Junta y tenga una vinculación con el grupo de la Diputación. Si soy secretario general los alcaldes no van a ser diputados provinciales como en estos cuatro años. En definitiva, hacer un equipo potente, en el que no se acumule demasiado poder en una o dos secretarías, como ha ocurrido en la actual Ejecutiva.

Me cuesta creer que no tenga los nombres ya. 
Sí, pero es muy precipitado darlos, pueden pasar muchas cosas y tampoco quiero quemarlos. Eso es la antesala de cargártelo a todos los efectos.