“Creí que Pérez Navas aceptaba dedicarse a la alcaldía, después descubrí que no”

Sánchez Teruel se enfrenta a su tercera elección al frente del PSOE de Almería

José Luis Sánchez Teruel aspirante a la reelección como secretario provincial del PSOE, durante un momento de la entrevista en el centro de la capita
José Luis Sánchez Teruel aspirante a la reelección como secretario provincial del PSOE, durante un momento de la entrevista en el centro de la capita
Antonia Sánchez Villanueva
23:26 • 16 sept. 2017

Para conseguir los avales (2.092 ha reunido de los mil que necesitaba cada candidato) no ha tenido que despeinarse. Para lo que sí se conjura con los suyos es para hacerse ver como útiles a la sociedad y ganar al PP.




¿Por qué quiere seguir liderando el PSOE de Almería?
Hace seis años nos planteamos renovar el proyecto del PSOE, en gran medida lo hemos renovado pero aún queda trabajo para conseguir que el PSOE sea el partido más querido por los almerienses.




El hecho de que haya dos candidatos más, ¿de qué es indicador, de que hay muchas corrientes, muchos descontentos, muchas ambiciones?
Bueno, nuestra candidatura es una decisión colectiva de seguir avanzando en la renovación del partido. Las otras dos candidaturas creo que son la consecuencia de una mesa de camilla.




Defina mesa de camilla.
Creo que son el resultado del acuerdo de unas pocas personas que no representan un proyecto colectivo para la provincia. Es lo que veo detrás, desde el más absoluto respeto a cualquier candidato a presentarse y a tener las motivaciones que considere oportunas.




¿Son mesas de camilla que existían antes o se han formado de manera oportunista?
Son los métodos de siempre. El PSOE que yo quiero para Almería es un partido que debe funcionar en todas y cada una de sus agrupaciones en base a los principios y valores de nuestra organización: la libertad, la igualdad, la solidaridad, ser capaces de unir a la gente para hacer cosas que beneficien a los pueblos, que les hagan progresar. No creo que deba el partido funcionar en base a intereses, eso sería un lobby.




¿Sus oponentes están funcionando como lobby?
Yo creo que en algunos sitios hay más intereses personales que principios a la hora de impulsar la acción del partido, y yo no comulgo con esa manera de entender la política.




¿No ha habido tiempo o no ha habido posibilidad de desarticular las mesas de camilla? Están ahí en cualquier escenario.
(Risas) Yo creo que son rocas. Se lo decía antes, es lo de siempre.




Por eso insisto, ¿no es posible desarticularlas?
Están muy minimizadas, muy reducidas.


Pero a cualquier ocasión le sacan un buen provecho.
Sí, sin duda. Hoy el partido que hemos construido es un proyecto colectivo, en el que se comparten las ideas, las propuestas, entre un montón de gente que opina y participa y se siente que está construyendo algo útil y beneficioso para la sociedad. Ese modelo de que cuatro quieren gobernar a una provincia es un modelo del pasado y lo que tenemos que hacer es tener un proyecto en donde todo el mundo tenga su espacio pero donde nadie quiera ser más que nadie o manejar a nadie.


Pero dicen que es en nombre de la militancia.
Eso es un mantra. La militancia no puede estar solo para votar en los procesos orgánicos. La militancia hay que implicarla como estamos proponiendo en las organizaciones sectoriales. Tenemos gente experta en temas de agricultura, de agua, tenemos referentes sociales en materia de emprendimiento, tenemos un capital humano enorme dentro de la organización. Yo no creo en un partido que utiliza la militancia como un comodín para protegerte cuando tú no eres capaz de defender tus planteamientos.


Entre esas dos candidaturas hay una que sale de su propio equipo
En realidad las dos, porque tanto Antonio López Olmo como Juan Carlos Pérez Navas han estado en mis dos ejecutivas.


Quizá la de Pérez Navas sea la más significativa por ser el secretario de organización, su número dos. ¿Sabía previamente que iba a dar ese paso?
No lo sabía. Sé que es verdad que tuvimos varios encuentros con el fin de trabajar por un proyecto conjunto porque era la opción que más fortalecía al partido. El último fue el 8 de agosto, en una comida donde le sugerí que debía centrarse exclusivamente en alcanzar la alcaldía de la ciudad de Almería y que ahí iba a contar con todo mi apoyo porque la alcaldía de Almería para el PSOE es muy importante. De esa comida me fui convencido de que era un planteamiento que él aceptaba. Después descubrí que no.


¿Le ha traicionado?
No, no, quizá no ha habido entre él y yo el 'feeling' que debe existir entre un número uno y un número dos, y quizá, fíjate, no tanto por él. A veces los aconsejadores externos pueden ejercer más o menos influencia en nuestro comportamiento.


Entonces la pregunta es, ¿ha dado el paso inducido por otros?
Él es el que tiene que dar esa respuesta, lo que yo pueda decir son suposiciones.


Él dice que lo hace para aportar más.
Hombre, pues si es para aportar más, desde una secretaría de organización se podría haber hinchado de aportar. Como secretario general, yo solo pido trabajo, trabajo en equipo y con lealtad. Evidentemente, sobre esa base lo que quiero es lo mismo.


Si no ha sido traición, ¿ha sido deslealtad?
Bueno, ha sido, como digo, falta de 'feeling'.


Si vuelve a ganar la secretaría general, ¿integrará a los otros candidatos?
Soy consciente de que la responsabilidad de un secretario general es tratar de mantener a la organización fuerte y unida. ¿Cómo se concretará? Pues será cuestión de verlo en ese momento, pero trabajaré para que todo el mundo arrime el hombro en la dirección en la que yo le propongo a la organización. Yo quiero un PSOE útil a la sociedad, que esté todo el tiempo dedicado a eso, que se dedique a impedir desahucios, a solucionar problemas como el de las Cuatro Vegas, a ayudar para que nuestros agricultores de alhóndigas puedan optar a los fondos operativos o a pelear porque infraestructuras importantes se incluyan en los presupuestos. Si lo hacemos en todos sitios, y especialmente en las poblaciones más grandes, el PSOE ganará, como ganó en otros tiempos.


Antonio López Olmo reprochaba la pérdida de apoyo electoral al PSOE durante mucho tiempo y la falta de peso político del Poniente.
Decir que el Poniente no tiene peso político es faltar a la verdad. Ha tenido en estos años diputados nacionales, parlamentarios andaluces y ahora la delegada del Gobierno de la Junta es militante de El Ejido, el delegado de políticas sociales también, tiene cuatro diputados provinciales... En cuanto a las victorias electorales, pues, hombre, si miramos hacia atrás se puede ver la evolución. En Andalucía hemos pasado de 7-4 a un 5-5 en parlamentarios andaluces con el PP. En el ámbito municipal heredamos 35 ayuntamientos gobernados por el PSOE y 8 diputados provinciales. Hoy tenemos diez diputados provinciales y la mitad de los ayuntamientos. Evidentemente hay que hacer mucha más política útil en grandes poblaciones. Las agrupaciones de El Ejido, Roquetas o Almería tienen que ser un hervidero de actividad, no hacia adentro, hacia afuera. Donde se hace, se gana.


Su posición es la afín a Susana Díaz, la de Antonio López Olmo es la afín a Pedro Sánchez, ¿cuál cree que es la de Pérez Navas?
Nuevamente no soy yo el que debe responder a eso. Yo siempre he estado y estaré en el mismo sitio.


Él dice que es 'susanista'.
Me parece perfecto.


¿Se puede ser 'susanista' y plantear una candidatura alternativa a la "oficial"?
Ese tipo de pregunta a quien le corresponde responderla es a él. Yo estoy convencido de que al partido le hubiese venido mejor un proyecto compartido, pero no ha sido esa la voluntad. Sinceramente, no lo entiendo.


¿Y entiende que Antonio Bonilla (presidente del partido y alcalde de Vícar) esté con Juan Carlos en esa propuesta?
Ellos desde hace mucho tiempo tienen una estrecha relación personal, y yo creo que lo uno lleva a lo otro.


Supongo que los apoyos a Antonio López Olmo sí los esperaba.
Sí, seis años en la secretaría general del PSOE son un máster. Yo tengo desde hace días, mis compañeros algunos lo conocen, una previsión de lo que puede pasar en el proceso electoral.


¿Han hecho una porra o algo así?
No, no, simplemente haces números y, sabes quien tiene más afinidad con quién y por qué, aquí nos conocemos todos. Y es cuestión de hacer un repaso mental para saber la gente que se va a situar en un sitio, y también porqué, yo lo único que puedo decir es que estoy disfrutando muchísimo, me siento emocionado del cariño que recibo de mis compañeros, del empeño que ponen por un proyecto que lo único que busca es que el Partido Socialista en Almería sea un partido útil para la gente, y que todo el mundo esté en eso y no en otras cosas.


¿Dentro de esas previsiones entra la posibilidad de que una de las candidaturas apoye a la otra, fusión de candidaturas?
Totalmente. Yo creo que en las mesas de camilla donde nacen las candidaturas hay gente que ha comido mucho durante muchos años juntos y, por tanto, sería muy fácil esa unión.


¿Cree que responde a un plan preconcebido y que alguna candidatura es de paja?
Pues muchos compañeros así lo piensan.


¿Y usted lo piensa?
Me reservo mi opinión.


Si usted renueva como secretario provincial, ¿Juan Carlos Pérez Navas podría ser candidato a la alcaldía?
Eso lo decidirán los compañeros y la organización cuando llegue el momento. Yo creía que podíamos sumar más, precisamente centrando sus esfuerzos en ser alcalde de Almería y no en otra cosa. Pero, bueno, si la decisión personal es otra hay que respetarla y evidentemente ante nuevos escenarios habrá que contemplar también nuevas respuestas.


Porque, ¿ser secretario general -si ganara él -, candidato a la alcaldía y senador, es descabellado?
Nuevamente habría que preguntarle a él. La secretaría general del partido tiene tanto trabajo como tú quieras hacer, no hay horas. Evidentemente estar en tantos sitios a la vez es inviable y Juan Carlos en el corto plazo seguro que va a tener que optar, pase lo que pase el 1 de octubre.


Pase lo que pase entonces.
Él debe hacer una reflexión porque en un trabajo hay que estar al cien por cien. El ser alcalde de Almería es un reto extraordinario y eso solo se consigue con muchas horas, desde las 8 de la mañana hasta las 12 de la noche todos los días, no solo el candidato, sino el equipo de la corporación, el equipo de la agrupación, todo el partido en su conjunto. Si la opción es dedicarse a otra cosa, será él quien tenga que tomar esa decisión.


¿Se siente como un delegado de Susana Díaz?
Yo me siento afortunado de representar al PSOE de Andalucía que lidera Susana Díaz, quien se ha comprometido con esta provincia profundamente. Antes le decía que Almería es líder en Andalucía en licitación de obra pública. Estamos hablando de treinta y tantos millones de euros en obras en colegios, treinta y tantos millones en centros de salud o en el Materno Infantil, 85 millones en la ciudad de Almería con proyectos como el del nuevo Conservatorio. Las obras en materia de comunicaciones se han reactivado. Creo que se está haciendo una magnífica gestión.


¿Cree que en Andalucía los afines a Pedro Sánchez conseguirán la cuota de poder que buscan?
Una amplísima mayoría en toda Andalucía cree que el liderazgo de Susana Díaz es incuestionable, y quien venga a moverle el suelo se equivoca y a lo que debería dedicarse es a hacer política útil, como ella hace cada día.


Los sondeos indican que desde el triunfo de Pedro Sánchez el PSOE ha mejorado expectativas de voto. ¿Eso avala a Sánchez frente a la opción de Susana Díaz?
No, simplemente en el momento en que se hace esa encuesta lo que pone de manifiesto es que el proyecto del Partido Socialista resulta atractivo y ahora lo que hay que hacer es que ese sentir se convierta en votos. Pero no hay que hacer otras lecturas.


¿Esperaba que sus rivales consiguieran los avales?
Era mi segunda opción. La primera era que ninguno los consiguiera. Ellos saben que la primera es la más ajustada a la realidad.


Entiendo que a usted no le costó conseguirlos.
Desde el primer día teníamos la cantidad suficiente, ese mismo día se recogieron en torno a mil avales.


Como para haberse echado a dormir.
No para echarte a dormir, sino sentía el cariño, el respaldo de esos hombres y mujeres de las distintas agrupaciones de la provincia que lo que querían era que este proyecto no tuviera ningún palo en la rueda porque consideran que si hasta ahora hemos ido al 50 por ciento de nuestra capacidad, si todo el mundo pone de su parte podemos ir al cien por cien y el PP en la provincia de Almería puede perder la hegemonía.


¿Confía en que en las próximas municipales puede haber vuelco electoral en Almería?
Sin duda. Si de aquí a las próximas elecciones en el partido está centrado todo el mundo y todo el tiempo en ser útil a los ciudadanos de cada pueblo, de cada barrio de Almería, de El Ejido, de Roquetas, el PSOE dará el vuelco en la provincia, porque somos mejores que los dirigentes del Partido Popular. Fue evidente en 2015, donde recuperamos un montón de alcaldías, Dalías, Cantoria, Garrucha, Cuevas de Almanzora, en Vera estamos gobernando con un acuerdo, Tabernas. Tenemos que procurar que la dirección provincial pueda estar dedicada todo el tiempo a ayudar a los compañeros en el territorio y no a otra cosa.



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