El Frontex prorroga su campaña en el Mar de Alborán por la crisis de las pateras

El coronel Arturo Prieto, jefe de la Comandancia de la Guardia Civil en Almería, definió la pasada semana la crisis migratoria en el Mar de Alborán como “una tragedia humana”. Las cifras avalan el análisis del coronel, con decenas de muertos confirmados y 4.500 inmigrantes rescatados desde principios de año en la provincia de Almería y su entorno cercano. Datos de récord.

La situación provoca medidas excepcionales. Por primera vez en una década, la Agencia Europea de Guardia de Fronteras y Costas (Frontex) extiende el radio de acción de su campaña especial de seguridad en las aguas de Alborán.
La denominada Operación Indalo tenía fecha de caducidad el 31 de octubre, justo seis meses después del inicio de las tareas en el litoral andaluz, pero la crisis de las pateras obliga a prorrogar su vigencia, al menos, hasta finales de este 2017.

La llegada de embarcaciones clandestinas a la zona SAR de España (radio de acción de Salvamento Marítimo) es constante, más aún con la permanencia del buen tiempo, las altas temperaturas y la ausencia de viento. Según datos del Frontex actualizados hasta el mes de septiembre, España ha recibido 14.800 inmigrantes irregulares. Prácticamente un tercio accedieron al territorio nacional en una embarcación de rescate del Centro de Coordinación de Salvamento en Almería o, en menor medida, en una patrullera de la Guardia Civil.

Según fuentes oficiales de Frontex, la Operación Indalo moviliza actualmente a 69 personas, un barco (una patrullera italiana a menudo visible en el Muelle de Levante del Puerto de Almería) y un avión. 

Mafias y guerra
Los recursos internacionales se complementan con los agentes de la Policía Nacional y la Guardia Civil, con el doble objetivo de perseguir la entrada irregular en inmigrantes a territorio europeo y luchar contra las mafias de tráfico de personas que operan generalmente en Marruecos y Argelia.

El Frontex señala también el impacto del terrorismo en países como Mali o Senegal, donde el avance del yihadismo ha provocado un desplazamiento de la población y, en muchos casos, la huida hacia el norte. Según Acnur, la guerra en Mali ha provocado 280.000 desplazados interiores y 176.000 huidos del país desde 2013. Este país es protagonista en las peticiones de asilo político en Almería y cuenta actualmente con una misión europea con participación de miembros de la Brigada de la Legión.

Por otra parte, por primera vez en años, las pateras vuelven a embarcar a ciudadanos marroquíes que, a pesar de los acuerdos bilaterales de repatriación, se juegan la vida en las aguas de Alborán con la esperanza de alcanzar suelo español.