Núñez: "35 de las 66 exigencias de Cs no tienen partida"

El Grupo Municipal Socialista no se cree el acuerdo que Ciudadanos y Partido Popular han firmado para la aprobación de los presupuestos para 2018. Y es que los socialistas han hecho cuentas y de las 66 medidas que los naranjas plasmaron en el documento de acuerdo firmado entre Rafael Burgos (Cs) y María del Mar Vázquez (PP) un total de 35 no cuentan con una partida presupuestaria asociada.

Explica la viceportavoz socialista, Carmen Núñez, “carece de toda credibilidad porque el análisis de los documentos que dieron lugar a la creación de los presupuestos anteriores recogen un grado de incumplimiento que roza lo vergonzante, y en segundo lugar porque en el análisis del documento actual nos lleva a la conclusión de que de 66 medidas que se recogen 35 carecen de una partida específica”. Por tanto considera la concejal socialista que “el alcalde tiene que decir hasta aquí, no todo vale para gobernar en minoría. Tiene que  dejar de tragar y firmar cosas que no quiere firmar, y si lo hace, por lo menos que las cumpla y que las lleve a cabo”.

Medidas
Exactamente esas medidas que no aparecen en los presupuestos municipales, según han podido constatar los socialistas, pasan por el estudio de la adquisición de la Casa Palacio de los Góngora; la adquisición de la guardería de Blas Infante que ya el año pasado iba en el documento pero para su reacondicionamiento; el estudio de compra de un centro social en La Cañada; actuaciones en Cuevas de los Medina; un plan integral para Loma Cabrera; la monotorización de ruidos en el ferial; el solar para béisbol en la Vega de Acá; la plataforma virtual de participación ciudadana; la patrulla en bicicleta del Paseo Marítimo; el estudio del ORA para trabajadores; o la playa canina.

Proyectos
Son muchas las medidas sin partida pero llama la atención la ausencia del estudio del mariposario; la reclamación del arreglo del skate park del Parque de los Periodistas reinagurado hace poco; el saneamiento de La Almadraba de Monteleva o el que se pretenda que se compre material del servicio de limpieza sin ruido cuando debería realizarse por parte de la empresa concesionaria.