España toma el mando de la misión contra el yihadismo en Mali, liderada por la Legión

España tomó el miércoles el mando de la misión internacional de la Unión Europea en Mali (EUTM-Malí), liderada por un contingente de legionarios procedentes de las bases de Viator (Almería) y Ronda (Málaga). La ministra de Defensa, María Dolores de Cospedal, viajó hasta el acuartelamiento de Koulikoro, al noreste de la capital Bamako y a los pies del río Níger, para  presenciar personalmente el relevo del mando hasta ahora en manos de Bélgica.

La misión tiene como objetivo el adiestramiento de las tropas locales en la lucha contra los yihadistas que han tomado la mitad norte del país, en pleno Sahel. Se trata de un despliegue iniciado por Francia y apoyado por España como parte de una estrategia de contención de los grupos rebeldes que controlan, entre otras cosas, los flujos migratorios hacia el norte.

La Brigada de la Legión envió un primer contingente en el mes de noviembre. El 11 de enero se añadió un grupo de 60 militares embarcados en el Aeropuerto de Jerez de la Frontera. Y, actualmente, las fuerzas españolas alcanzan los 292 efectivos, el grueso de legionarios pero también de otras unidades del Ejército de Tierra.

En Mali están destinados legionarios del Grupo de Caballería II de la Legión, el Grupo Logístico, la Bandera de Zapadores, la Bandera de Cuartel General y el Grupo de Artillería. El general español Enrique Millán Martínez se pone al mando de la misión EUTM-Mali, reforzada con 140 militares adicionales (hasta sumar los 292 totales).

Según informa el Ministerio de Defensa, España participa en la misión de la Unión Europea ‘EUTM-Malí’ desde abril de 2013, cuyo primer contingente estuvo formado por 50 efectivos. Posteriormente, tras el acuerdo del Consejo de Ministros de 7 de junio del mismo año, se incrementó el número de efectivos hasta 110, debido a la mayor implicación española en la formación y adiestramiento.

Durante 2017 participaron en la misión 451 militares españoles, principalmente del Ejército de Tierra, que adiestraron a 2.100 militares malienses de los más de 11.500 instruidos por el personal de la misión. “España está especialmente vinculada e interesada para proteger a nuestros ciudadanos y nuestros intereses nacionales”, afirmó Cospedal. “Queremos que pueda alcanzar la esperanza de tener un país donde haya estabilidad, donde sus ciudadanos, sus hombres y mujeres, no tengan la necesidad de verse atrapados por fanáticos terroristas o movimientos criminales, o sea presa de la inmigración y de los traficantes”.