Una operación antiterrorista desarrollada por los servicios de información de España y Francia permitió la captura este miércoles de un ciudadano magrebí presuntamente vinculado al atentado frustrado en el tren entre Ámsterdam (Holanda) y París (Francia) el 21 de agosto de 2015.
El detenido tiene 35 años de edad, posee nacionalidad marroquí y carece de permiso de residencia legal en España.
Los agentes de la Brigada de Información de la Comisaría de la Policía Nacional en Almería detectaron un domicilio conocido en la provincia, zona donde habría pasado ciertas temporadas.
La investigación coordinada por Manuel María García-Castellón, magistrado del Juzgado Central de Instrucción número Seis de la Audiencia Nacional, vincula al sospechoso con la célula terrorista que preparó un atentado contra el pasaje del tren Thalys 9364.
Militares de EEUU
El caso adquirió una enorme repercusión por la intervención de tres militares de Estados Unidos que evitaron una masacre en el tren (la historia llevada ahora a la gran pantalla por Clint Eastwood). El joven marroquí Ayoub El Khazzani accedió a los vagones con un fusil de asalto, una pistola y nueve cargadores preparados para el ataque. En el tren viajaban más de 500 personas. Sin embargo, los militares americanos de paisano se percataron de la amenaza y consiguieron reducir al terrorista sin víctimas.
El suceso motivó una profunda revisión de los sistemas de seguridad en las líneas ferroviarias francesas y belgas y una alerta en las conexiones de tren de toda la región. Inicialmente la investigación señaló a Ayoub El Khazzani como único responsable del atentado frustrado por los soldados estadounidenses. Los indicios apuntaban a una radicalización individual inspirada en la propaganda de Estado Islámico (Daesh), en el momento de mayor actividad del Califato de Al Bagdadi.
Sin embargo, los servicios de información reconstruyeron sus presuntos contactos con una célula yihadista, necesaria para la cobertura del terrorista y la obtención de las armas de fuego. Además, se comprobó que Ayoub El Khazzani de 26 años de edad había viajado anteriormente por ciudades de España, Francia y Bélgica.
Este miércoles se produjo la detención de un ciudadano residente en Almería, cuya participación se sitúa presuntamente en esta fase logística. Los investigadores creen que el sospechoso ofreció cobertura a la célula que planeaba atentar en el tren Thalys 9364.
El detenido se había refugiado durante las últimas semanas en Marruecos. Francia solicitó apoyo a las autoridades españoles a su regreso a territorio comunitario. Finalmente, este miércoles fue localizado y detenido en una operación antiterrorista en París. El sujeto se encontraba de camino a Bélgica, donde mantenía contactos con la nutrida comunidad marroquí asentada en la región.
El ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, felicitó la tarde del miércoles a la Policía Nacional a través de su perfil en Twitter y agradeció la colaboración de las fuerzas antiterroristas francesas. El detenido permanece en París. No han trascendido detalles sobre su identidad.
Antecedentes
La historia criminal de la provincia de Almería está salpicada de operaciones contra el terrorismo islamista. Existen antecedentes de investigaciones desarrolladas en la zona desde los años noventa, cuando las amenazas más cercanas provenían del Grupo Islámico Armado (el GIA de Argelia) y salafistas de Marruecos.
Los atentados del 11M en Madrid supusieron un punto de inflexión en materia de seguridad antiterrorista en España. Almería tuvo un papel clave en la siguiente gran operación policial, conocida como Operación Nova y desarrollada entre los meses de abril y octubre de 2004. Se produjeron arrestos en Almería y la comarca del Poniente y se acreditó la presencia del principal cabecilla durante aquel verano en Roquetas de Mar.
La Operación Nova destacó el papel de la provincia como un punto caliente en materia antiterrorista, no como objetivo directo sino como lugar de refugio y tránsito de los yihadistas. Las conexiones por barco con Marruecos y Argelia y, especialmente, la enorme comunidad magrebí asentada en la provincia suponían un atractivo para los yihadistas. Los atentados en la Operación Nova tenían planes para atentar contra la Audiencia Nacional, la sede del Partido Popular en Madrid y una estación de metro. El ataque se frustró gracias a la investigación policial.
Desde entonces se ha producido un goteo de operaciones entre Policía Nacional, Guardia Civil y CNI. En noviembre la Benemérita arrestó a un ciudadano marroquí, ex recluso de El Acebuche, acusado de poner a la venta dos rifles AK47 con 800 proyectiles.
Desde 2012, han trascendido varias operaciones contra redes de captación de fondos y combatientes para el Estado Islámico desde la provincia de Almería. El nivel 4 de alerta antiterrorista obligó a aumentar los controles en una frontera especialmente caliente por sus conexiones con el norte de África. También las labores de inteligencia y lucha contra el proselitismo en las redes sociales.
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