Cientos de ‘peregrinos’ de la historia llegan a Almería

Huyendo de los horrores de la Guerra Civil, miles de malagueños dejaron sus hogares el 8 de febrero de 1937 para llegar a Almería, ciudad bajo control del Ejercito Popular Republicano y, por tanto, única vía de escape en pleno conflicto para decenas de miles de personas que, durante todo el camino, fueron atacadas por tierra mar y aire. Entre 3.000 y 5.000 civiles y milicianos malagueños perdieron su vida en la llamada masacre de la carretera Málaga-Almería, también conocida como la carretera de la muerte, en  ‘La Desbandá’. 

En homenaje a este episodio, considerado uno de los más sangrientos de la Guerra Civil, el Club de Senderismo ‘La Desbandá’ ha repetido el mismo recorrido de 250 kilómetros   por la carretera Málaga-Almería. 

Marcha y memoria Once jornadas de ‘peregrinación’ y memoria histórica que finalizaron durante la mañana de ayer con la llegada de unas 200 personas al centro de Almería. En las distintas etapas han participado en torno a 800 personas en total, siendo la jornada finalizada en Salobreña el pasado fin de semana la más masiva con 500 participantes. 

“Al final de cada etapa organizamos actos, conferencias, presentaciones de libros y otras actividades”, explicó el presidente del club, Rafael Morales, a su llegada a Almería, donde finalizaba el recorrido con una ofrenda floral en el monumento a las víctimas del campo de concentración nazi de Mauthausen en el Parque de las Almadrabillas tras realizar paradas en Pescadería -donde llegaron los malagueños hace 81 años- o en la Puerta Purchena. La cantautora de La Chanca Sensi Falán aportó la música en este homenaje. 

Es la segunda vez que se organiza esta marcha iniciada el año pasado en el 80 aniversario de este hito por  parte de la Federación Andaluza de Montañismo. Ahora, este club persigue mantener esta tradición. El fin “a largo plazo”  es señalizar el Sendero de la Memoria de ‘La Desbandá’ entre Málaga y Almería “para que las personas que, en cualquier momento, quieran completarlo o hacer alguna  etapas tengan un sendero con su significado”, explica Rafael Morales.