Rozalén: "Interpretar ‘Girasoles’ será un canto a la alegría, será inevitable pensar en Gabriel"

“Y el mundo está lleno de mujeres y hombres buenos, así que le canto a los valientes”, dice ‘Girasoles’ de Rozalén, que ha seguido con emoción cómo su tema se ha convertido en un motivo de esperanza en el caso de Gabriel.

¿Cómo está viviendo el hecho de que su canción ‘Girasoles’ se haya convertido en todo un símbolo en la búsqueda, primero, y en el recuerdo, después, de Gabriel Cruz?
Me está llamando un montón de gente de muchos sitios y me está dando un poco de apuro porque yo creo que no tengo que ser la protagonista hoy. Cuando haces una canción, te sale de dentro, son tus cositas, pero luego ya no son tuyas, son de la gente.

¿Ha podido hablar con los padres: Patricia y Ángel?
Sí, estuve hablando con ellos el sábado porque querían incluso pedirme permiso para usar el tema y yo pensé: “¿Será posible? ¿cómo me vais a pedir permiso para algo así?”. Aluciné y la verdad es que tengo muchas ganas de conocerlos. 

Tras el funeral, la madre de Gabriel pidió a todo el mundo que escuchase la canción y recordase a su hijo con alegría, y no a la bruja mala.
Sí, está todo el mundo destrozado y pienso en todos los niños que se están subiendo al escenario conmigo, en mi sobrino, y bueno, no es justo que ni él ni ningún niño se tenga que comer el odio de la gente.

La letra de ‘Girasoles’ habla de gente buena, de valientes. Parece escrita para Patricia, la madre de Gabriel.
Desde luego, Patricia está siendo un ejemplo, su entereza y lucidez es para quitarse el sombrero. Cuando ocurrió todo, me metí en las redes sociales y aluciné con los mensajes de odio. Es normal que de primeras todo el mundo lo sienta, pero no que lo verbalices de esa manera. Las redes se están convirtiendo en un vertedero de odio y me ha parecido ejemplar que esta mujer, que sí que tiene motivos para odiar, diga eso: “No le dediquemos tiempo a los malos, los buenos somos mayoría”. 
Es lo que yo pensaba cuando hice la canción, que nació en un momento que no era muy bueno para mí.  Si focalizamos la atención en esa buena gente, quizá lo oscuro deje de brillar. Aunque reconozco que es cierto que hacen mucho ruido y que estos días es complicado tener fe en la humanidad. 

A raíz de la desaparición del niño y el ejemplo de dignidad de Patricia, se ha generado un movimiento social en Almería que ha tenido eco en toda España. ¿Le ha llegado?
Sí, a través de llamadas y mensajes de Whatsapp. La mayoría de la gente es sensible y, ante un caso así, se nos encoge el alma. Me vienen imágenes a la cabeza y a mí se me encoge el alma.

A partir de ahora, ¿será distinto cantar ‘Girasoles’?
Claro que va a ser diferente cantarla. El sábado, cuando hablé con ellos, incluso fantaseamos con la idea de que en mi próximo concierto de Almería nos conociésemos y ellos me decían: “Ojalá que esté ya Gabriel con noso­tros y pueda subirse a cantar”. Y esa noche toqué en Sevilla y la canción se la dedicamos a él y a su familia: estábamos más de 3.000 almas mandando esa energía. Cada vez que la interpretemos, será un canto a la alegría, será inevitable pensar en él. 

En su concierto del 11 de mayo en el Auditorio Maestro Padilla de Almería, no podrá faltar. 
No faltará. Y a ver si puedo escaparme un día antes para conocer a Ángel y a Patricia. Ellos están animando al resto de la gente, es una cosa súper curiosa. Ahora ya nos tendremos para siempre. Tengo muchas ganas de ir.