La instrucción judicial de la denominada Operación Nemo avanza paso a paso para reconstruir la muerte del pequeño Gabriel Cruz Ramírez el pasado 27 de febrero en una finca de Rodalquilar (Comarca de Níjar). El magistrado Rafael Soriano hace acopio de pruebas contra Ana Julia Quezada, autora confesa del crimen y acusada de presuntos delitos de asesinato, detención ilegal y contra la integridad moral.
Patricia Ramírez y Ángel Cruz prestaron declaración este jueves en el Juzgado de Instrucción número Cinco de Almería. Durante dos horas, los padres del menor aportaron detalles sobre el comportamiento de Ana Julia Quezada antes y después de la desaparición de Gabriel Cruz en un camino rural de Las Hortichuelas.
Los testigos entraron en la Ciudad de la Justicia de Almería por el garaje, sin hacer declaraciones a los muchos medios congregados en los juzgados. Pasadas las tres de la tarde abandonaron el edificio en un vehículo conducido por sus abogados, los hermanos Francisco Torres y Miguel Ángel Cruz, ambos conocidos como expertos penalistas.
“Hoy, sin duda, es uno de los días más duros a los que nos vamos a enfrentar. Si pensamos en Gabriel, creemos que nos sonreiría y nos diría que ha que estar contentos”, afirmaron los padres en un breve comunicado a los medios.
A continuación adjuntaron una felicitación de Navidad con imágenes del propio Gabriel Cruz y su madre Patricia Ramírez. “Espero que pueda en el día de hoy aliviar tanto dolor”, añadieron en el mensaje.
La declaración de los padres estaba orientada fundamentalmente a la reconstrucción de los movimientos de Ana Julia Quezada y a la exploración del posible móvil del crimen, un detalle todavía envuelto por las dudas (Ana Julia Quezada, en su confesión, habló de una agresión en un arrebato y tras una discusión con el niño en la finca de Rodalquilar).
Integridad moral
Ahora bien, el testimonio de Patricia Ramírez y Ángel Cruz tenía también una segunda utilidad. El magistrado instructor Rafael Soriano incorporó en su auto de prisión la imputación de un presunto delito contra la integridad moral (no solicitado por la fiscal Elena Fernández). La acusación alude directamente a la actitud de Ana Julia Quezada tras el crimen.
La sospechosa ocultó la muerte y participó en las batidas de búsqueda y las manifestaciones para pedir el regreso de Gabriel Cruz. El auto del juez instructor clarifica la perspectiva de la acusación. “Se trasladó a Las Hortichuelas y, sin reconocer el crimen cometido, dio una falsa apariencia de preocupación por la desaparición y la suerte del niño, engaño que mantuvo a lo largo de los días, aumentándolo hasta el punto de colocar ella misma una prenda del menor en el monte”, relata el magistrado en el auto de prisión.
Las diligencias del Juzgado de Instrucción número Cinco de Almería continúan este viernes con la declaración de la abuela de Gabriel Cruz.
La mujer fue la última persona en ver al niño antes de que desapareciera en el vehículo de Ana Julia Quezada en Las Hortichuelas. La comparecencia está prevista a las 12 horas.
De momento, el magistrado mantiene el secreto de sumario en la causa. La única sospechosa del crimen permanece en prisión provisional, comunicada y sin fianza en El Acebuche desde hace una semana. Estén en régimen de protección en el Módulo Uno del centro penitenciario de Almería junto a otras 40 internas.
Esteban Hernández Thiel, abogado de Ana Julia Quezada, reiteró su petición de “mesura” a los medios de comunicación a la salida de la Ciudad de la Justicia de Almería y apeló al derecho de defensa de todos los ciudadanos.
“Solamente cabe celebrar un juicio justo desde la serenidad y, aunque yo comprendo el dolor y la sensación social que hay, que es comprensible, sí que solicito mesura en el caso para permitir que se imparta justicia con serenidad, que es la única manera en la que se puede ser justo”, señaló el letrado.
Sobre el secreto de sumario, el letrado afirmó que “el juez lo levantará cuando lo considere oportuno”. “No me cabe duda sobre la competencia del Juzgado de Instrucción y sobre la Administración de Justicia en general”, apostilló.
Esteban Hernández, abogado de la defensa: "solicito mesura para permitir un juicio justo"
Esteban Hernández Thiel, abogado de Ana Julia Quezada, reiteró su petición de “mesura” a los medios de comunicación a la salida de la Ciudad de la Justicia de Almería y apeló al derecho de defensa de todos los ciudadanos.
“Solamente cabe celebrar un juicio justo desde la serenidad y, aunque yo comprendo el dolor y la sensación social que hay, que es comprensible, sí que solicito mesura en el caso para permitir que se imparta justicia con serenidad, que es la única manera en la que se puede ser justo”, señaló el letrado.
Sobre el secreto de sumario, el letrado afirmó que “el juez lo levantará cuando lo considere oportuno”. “No me cabe duda sobre la competencia del Juzgado de Instrucción y sobre la Administración de Justicia en general”, apostilló.
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