La UAL contará en 2020 con facultad de Medicina

La Universidad de Almería  tiene la intención de implantar la facultad de Medicina dentro de dos años, retomando así uno de los proyectos de mayor envergadura y calado de la institución académica y que la crisis frenó de golpe en 2013.

Cinco años después, con la situación económica recuperada, la iniciativa vuelve a situarse en primera línea de la agenda política universitaria. La decisión, muy avanzada según ha podido conocer este periódico de fuentes de toda solvencia, cuenta con el aval de la Junta de Andalucía. El rector de la UAL, Carmelo Rodríguez, ha mantenido ya varias conversaciones –de forma presencial y telefónica- con la delegada del Gobierno de la Junta en Almería, Gracia Fernández, que le ha mostrado la “total predisposición” del Ejecutivo andaluz para trabajar juntos en la consecución de este objetivo. “El entendimiento es total”, añaden estas mismas fuentes.

Rodríguez se encuentra ahora con el camino despejado, con un Plan de Estudios casi finalizado y una coyuntura económica favorable. En un escenario completamente distinto se movió su antecesor en el cargo, Pedro Molina, que impulsó el proyecto, firmó con el Ayuntamiento de Almería un acuerdo de cesión de los terrenos donde se construirá la futura facultad -en el solar donde ahora, de forma provisional, están los aparcamientos del Complejo Hospitalario Torrecárdenas- y encargó la redacción del Plan de Estudios, el documento que estructura, al más mínimo detalle, el futuro Grado de Medicina. Ahora, ese ‘libro blanco’, que tardó dos años en elaborarse, tendrá que actualizarse y ponerse al día, una tarea que podría tardar casi un año. Después, llegará la acreditación de la Aneca, la Agencia Nacional de Evaluación de la Calidad y Acreditación, otro trámite que, igualmente, podría demorarse varios meses más.

Si el informe de la Aneca resulta favorable, la aprobación de la nueva facultad quedaría condicionada al visto bueno de la Junta de Andalucía que, de entrada, parece que existe. Tras la ratificación por parte del Consejo de Gobierno del Ejecutivo andaluz, el proyecto tendría que enviarse, como último trámite, al Ministerio de Educación.

A pesar de que todo este recorrido burocrático lleva su tiempo, la idea de la Universidad, que ha puesto ya el acelerador, es que las clases puedan comenzar, como pronto, en el curso 2020-2021. 

60 alumnos
En principio, con una simulación de varias opciones posibles, se estima que la facultad de Medicina podría empezar con 60 alumnos (2 líneas de 27) y un número variable de profesores que aún no se ha concretado. La dedicación de los docentes, la mayor parte de ellos médicos en ejercicio en el Complejo Hospitalario de Torrecárdenas, sería parcial, aunque habría otros que  impartirían docencia a tiempo completo.

Las clases se darían durante los primeros cursos en el campus, en el edificio de Ciencias de la Salud, donde ya se imparten los Grados de Enfermería y Fisioterapia. Sería así hasta que finalizara el edificio de la nueva facultad junto a Torrecárdenas, cuyas obras no han comenzado aún.

La nueva facultad, junto a Torrecárdenas
Los terrenos donde se ubicará la futura facultad de Medicina están situados junto al Hospital Materno-Infantil, actualmente en construcción. Se trata de un solar de 17.000 metros cuadrados que el Ayuntamiento de Almería cedió a la Universidad de Almería a través de un acuerdo firmado el 28 de junio de 2010 entre el entonces rector de la UAL, Pedro Molina y Luis Rogelio Rodríguez-Comendador, que aún era alcalde de la ciudad. El acuerdo contemplaba un plazo de cinco años para que la institución universitaria comenzara las obras del edificio. Si no era así, estaba obligada a devolver el suelo municipal, como informó Lola González en una información publicada en este periódico el 26 de mayo de 2015.

En aquella fecha, hace ahora poco menos de tres años, se aprobó una adenda al convenio que permitía a la UAL seguir contando con ese terreno diez años más. Entonces, ya se barajaba la posibilidad de levantar la facultad de Medicina en un futuro y que esta compartiera algunas instalaciones con Torrecárdenas. 

El Colegio de Médicos ahora sí está a favor 
El Colegio de Médicos de Almería, que mostró una oposición feroz a la implantación de Medicina hace años, ahora sí está “satisfecho” con la noticia, como apunta su presidente, Francisco Martínez Amo, pero solo “si se consigue poner en marcha una facultad bien financiada con buen profesorado”. “Los catedráticos no se fabrican como si fueran churros. No es lo mismo ser buen médico que dar clases”, afirma.

 “El principal problema no es que falten facultades, sino el número de plazas de residentes. No es normal que cada año se vayan 10.000 estudiantes a Europa”, añade Martínez Amo. Junto a este, hay otro problema que preocupa mucho: la jubilación, en breve, de buena parte de los médicos que están en activo. En cinco años, habrá 240 médicos fuera de la circulación en Almería.

En principio, según ha podido conocer este periódico, el coste de la puesta en marcha de la nueva facultad rondaría los 16 millones, una cifra similar a la que supuso la de la Universidad de Albacete.