Más de 500 personas, con gran presencia de mujeres jóvenes, se han concentrado este jueves por la tarde en la Plaza Juan Cassinello de la capital para mostrar el rechazo y la indignación que ha provocado en buen parte de la sociedad española la sentencia dictada por la Audiencia de Navarra contra los cinco acusados del caso ‘La Manada’.
La decisión del tribunal, que les condena por delitos continuados de abuso sexual con prevalimiento, pero no por violación, ha generado una oleada de indignación que barrió todas las ciudades españolas nada más conocerse el resultado de la sentencia, poco después de la una de la tarde.
Miles de personas atendieron la llamada de colectivos y asociaciones feministas que, a través de las redes sociales y utilizando etiquetas como #EstaEsNuestraManada y #YoSiTeCreo, organizaron concentraciones frente a las Audiencias provinciales, ayuntamientos y plazas de distintas ciudades y capitales de toda España. También en Almería, donde la Asamblea Feminista 8M organizó la concentración con el lema “La manada somos nosotras”.
Durante la hora escasa que la Policía Local ha autorizado la protesta, centenares de personas han coreado consignas como “No estás sola”, “Si nos tocan a una nos, tocan a todas”, “Basta ya de justicia patriarcal”, “Sobrias, borrachas, queremos llegar a casa”, “No es no”, “Yo sí te creo”, “Quiero ser libre y no valiente” y “Escucha hermana, esta es tu manada”.
“Lo que ha ocurrido hoy debería hacernos pensar a todos. Solo nos queda esperar que a ninguna mujer nos pase algo así, porque ya se ha visto que la Justicia no está de nuestro lado”, reflexionaba Andrea López, una joven estudiante universitaria. Junto a ella, su amiga, Laura Mallol, calificaba de “vergonzosa” la decisión de los jueces. “Si no te hundes, si no te matan, es como si no hubiera pasado nada. Ahora mismo, siento vergüenza de ser española y de la justicia que tenemos en este país”, decía, sin querer ni poder evitar su indignación.
Manifiesto
“Hoy estamos aquí para apoyar a nuestra compañera, para defenderla, pero también por todas las mujeres que son violadas al día que no obtienen ayuda judicial. Estamos aquí para que este caso no se quede en una mera sentencia injusta y pase a revisión del Tribunal Supremo o incluso europeo. Nuestra compañera necesita que todas gritemos en contra de este sistema de justicia machista. Lo que hoy ha sucedido en esos juzgados demuestra que, en España, las mujeres no tenemos respaldo judicial. El mensaje que nos han enviado es que, si somos violadas, no tenemos posibilidad de ser protegidas, porque el violador es el jefe en España. Vivimos en un país en el que se reducen las penas de violación por buen comportamiento. ¿Qué buen comportamiento puede reparar el daño de una violación?”, se preguntaba el manifiesto redactado por la Asamblea Feminista 8M Almería y que han leído tres de sus integrantes.
El escrito califica la sentencia de “ataque directo a la integridad de todas como mujeres libres” porque considera que “incita a la violación porque deja claro que hacerlo es asequible y también un juego de hombres”. “Refuerza la superioridad moral del hombre sobre la mujer y, sobre todo, nos vende a todas como carne que se puede usar y tirar sin represalias”, han leído las organizadoras de la protesta.
“Nos ha parecido vergonzoso el voto discrepante del juez”, critica Gloria Gago, portavoz de la Asamblea Feminista. (El magistrado Ricardo González ha sido el único de los tres jueces de la Audiencia navarra que discrepa de la sentencia y que pidió la absolución de los acusados. Vio en la violación de la joven “sexo en un ambiente de jolgorio”).
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