¿En qué consiste exactamente el trabajo del fisioterapeuta?
Consiste en tratar cualquier alteración del sistema musculoesquelético alternando el trabajo manual del terapeuta con medios externos, como el frío, el calor o el movimiento.
¿Qué le impulsó a formarse y trabajar en este campo?
Estando en 3º de la E.S.O. descubrí el oficio y me encantó. Sobre todo me impactó la idea de ayudar. Creo que es lo que tendría que mover a las personas siempre.
¿Cuánto tiempo lleva ejerciendo el oficio?
Desde que terminé la carrera en 2009 estuve en una residencia durante cinco años, lo que alternaba con tratamientos en clínicas y dando cursos de formación en ergonomía.
Desde que se diplomó, ¿cómo ha evolucionado la profesión en estos años?
Están muy en auge las terapias invasivas. La acupuntura ya es una herramienta normalizada y tanto los electrodos como el EPI son técnicas muy extendidas que los pacientes ya han interiorizado, aunque esto tiene que ser un complemento a la terapia manual. A nivel científico, la figura del fisioterapia también ha mejorado. Hay estudios que demuestran que las lesiones tienen un por qué y un tratamiento para recuperarse.
¿Cuándo decidió montar su propia clínica?
Después de varios años de bagaje y experiencia, me asocié con mi tío, empresario e informático encargado de la gestión, para abrir el centro en 2016.
¿Qué servicios ofrece desde entonces?
Nacimos como centro de fisioterapia, pero también impartimos talleres para grupos reducidos de pilates terapéutico, yoga, tenemos una consulta de medicina de atención primaria a través de Mapfre y servicio de psicología, ya que muchas de las dolencias proceden de la presión a la que estamos sometidos y se incrementa la tensión en determinadas zonas, lo que conlleva a lesiones reales.
¿Cuáles son los beneficios del pilates ligado a la fisioterapia?
Ayuda a mejorar la posición en general, tonificar y estirar, pero también invita a la relajación a través de la atención que se pone en la respiración. En las mujeres es importante fortalecer el suelo pélvico y la zona abdominolumbar, lo que proporciona estabilidad a la columna. Si existe una patología, adaptamos los ejercicios.
¿Qué tipo de lesiones son las más frecuentes?
Las dolencias psicosomáticas se transforma en lumbalgias, alteraciones del diafragma, cervicales y la llamada ATM (articulación temporomandibular).
¿Hay alguna forma de evitar las dolencias psicosomáticas?
Si aprendiéramos a gestionar nuestra rutina para dedicarnos más tiempo a nosotros mismos, eso se traduciría en una mejora física.
¿Qué casos le parecen más complicados?
Los relacionados a las amputaciones y personas con cáncer. Una vez traté a un chico al que le dijeron que no volvería a caminar. Y lo hizo. Fue un proceso duro y largo, pero lo consiguió. Para mí, ver cómo los pacientes mejoran es mi mayor satisfacción.
¿Hay que acudir al especialista cuando se presenta un problema o periódicamente?
En el momento en que te moleste algo es importante acudir para evitar una lesión mayor. Si no existe ningún tipo de dolor, lo recomendable es hacer revisiones cada tres meses porque aunque no seas consciente, no significa que no se esté realizando una alteración a nivel corporal.
¿Qué papel juega la Seguridad Social en este sentido?
El sector está estancado. No incrementan los puestos de trabajo en relación a la demanda para disminuir las listas de espera. Por otro lado, si se basaran más en la prevención que en la curación, avanzaríamos en calidad de vida y disminuirían los costes.
¿Por qué habría que invertir en fisioterapia?
Es mucho más saludable basar la recuperación en un tratamiento físico que con pastillas u operaciones, por ejemplo.
¿Alguna recomendación para afrontar la rutina?
Los que pasan muchas horas sentados son propensos a padecer hernias lumbares y aconsejo el uso de reposapiés y reposamuñecas, aparte de mantener la espalda pegada al respaldo de la silla. Para los que trabajan de pie, lo más importante es evitar echar el peso únicamente en una pierna.
¿Qué ejercicio físico diario hay que realizar?
Yo recomiendo una hora diaria al mínimo de cardio con intensidad media. Caminar, nadar o aquagym sería suficiente.
Por último, ¿hay mucho intrusismo?
Más del que debería. Hay personas que hacen un curso de quiromasaje y ya se consideran fisioterapeutas. Tendría que haber un mayor control ya que es perjudicial y lesivo para los pacientes.
¿Cómo nos aseguramos de estar ante un verdadero profesional?
Asesorándonos del tipo de formación que tiene el fisioterapeuta, en qué está especializado y del tipo de tratamiento que realiza.
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