El hospital HLA Mediterráneo ha incorporado un innovador equipamiento que ayuda en el diagnóstico de una gran variedad de enfermedades digestivas, especialmente las pancreáticas.
Se trata del ecoendoscopio Olympus 190, que ha convertido a este centro en el único que cuenta con este novedoso modelo en Almería y, además, con un médico que ha recibido una formación específica para su uso, el doctor Álvaro Pérez, del área de digestivo. Este sistema permite obtener imágenes en alta resolución y muestras de gran nitidez, lo que mejora la detección y la identificación de las lesiones, el tratamiento a seguir y la evolución de la patología.
Este ecoendoscopio utiliza el método diagnóstico EUS, “una técnica mixta que emplea un endoscopio (un tubo flexible con un sistema de iluminación con una cámara) y un ecógrafo (genera imágenes mediante el uso de ultrasonidos) colocado en la punta del primero.
Un método más beneficioso
Las pruebas realizadas con este aparato permiten obtener imágenes ecográficas de la pared del tubo digestivo, de los órganos que lo rodean y de las lesiones tumorales y quistes. Además, permite la toma de biopsias o el drenaje de lesiones mediante punción.
El doctor Pérez ha explicado que el ecoendoscopio “ayuda a diagnosticar una gran variedad de enfermedades digestivas, en especial, las pancreáticas, la patología de la vía biliar, la estadificación locorregional de tumores de esófago, estómago y páncreas, y las lesiones submucosas del tracto digestivo alto”.
El Olympus 190 optimiza los procesos diagnósticos al localizar con más eficiencia los tumores e identificando con mayor precisión las propiedades de los tejidos con una visión ecográfica de 180 grados. Las imágenes captadas delimitan de modo más claro la patología y facilitan una orientación más precisa en la práctica de punciones y aspiraciones .
El diseño del Olympus 190 es muy compacto y reducido para facilitar una inserción más cómoda, un óptimo manejo en zonas de tránsito complejo y una experiencia menos traumática para el paciente.
La intervención requiere la sedación profunda del paciente, que se coloca tumbado sobre el lado izquierdo en la camilla. El ecoendoscopio se introduce por vía oral y la exploración dura entre 30 y 45 minutos.
La prueba no suele generar complicaciones, salvo algunas molestias pasajeras en la zona de la faringe o el esófago. Tampoco requiere hospitalización, salvo que se realicen punciones, que requieren el ingreso en observación durante 24 horas.
El Olympus 190: un diagnóstico más preciso
Esta nueva herramienta garantiza resultados más clarificadores en el diagnóstico. Así, en cánceres de la pared del tubo digestivo o del páncreas determina la profundidad de la lesión, lo que facilita la elección del tratamiento a seguir. También ayuda en la estadificación del cáncer de pulmón.
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