La ONU eleva la cifra de muertos en la ruta del Mar de Alborán a 566 personas

La ruta migratoria del Mar de Alborán y el Estrecho de Gibraltar alcanzan niveles históricos en el año 2018. Nunca antes tantos inmigrantes embarcaron en pateras con destino a España. Nunca antes tantos inmigrantes murieron durante las travesías.

Poner cifras a la entidad de la crisis humanitaria resulta complejo técnicamente. Las autoridades desconfían de los números ofrecidos por los supervivientes de los naufragios y muchas pateras desaparecen en la profundidad de las aguas mediterráneas sin dejar rastro alguno.

No obstante, entidades públicas y privadas ofrecen sus propios análisis. La Organización Internacional para las Migraciones (OIM), institución vinculada a la ONU, denuncia la muerte de 566 personas durante el año 2018 en la ruta migratoria entre Marruecos, Argelia y Andalucía. El grueso de los casos detectados por la OIM en su informe anual se produce en el Mar de Alborán, generalmente más cerca de las costas de Marruecos que de las provincias de Almería, Málaga o Granada.

Según el organismo de la ONU, los fallecidos casi multiplican por cuatro los registros obtenidos durante 2017 en el Mediterráneo Occidental y multiplica por 20 los datos de 2014. La OIM incluye en este informe las desapariciones de inmigrantes en pateras naufragadas y calcula que solo se recupera el 39 por ciento de los cuerpos de los muertos en la ruta.

Ese margen entre cadáveres localizados y desaparecidos es el principal escollo para los cálculos oficiales en España, que tienden desde hace años a rebajar sustancialmente las víctimas mortales de la inmigración irregular por vía marítima.

Las ONGs
Asociaciones no gubernamentales elevan incluso la estadísticas aportada por la OIM hasta el 6 de noviembre. Incorporados a los registros los 17 muertos y 17 desaparecidos del pasado lunes, la Asociación Pro Derechos Humanos cuantifica 629 fallecimientos este año. No existen precedentes en España de esta entidad. “Señalamos a los gobiernos de España y de la UE como responsables de las muertes en el Estrecho; la sociedad civil no puede permanecer indiferente ante esta masacre”, señaló este martes Rafael Lara, portavoz de la asociación en un acto de solidaridad celebrado en la provincia de Cádiz.

La Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR) cifra en “alrededor de 600 personas” los fallecidos en la ruta migratoria de Alborán y el Estrecho. “Otro día de horror insoportable en nuestro Mediterráneo: al menos 17 personas han muerto tratando de llegar a España”.

El Ministerio del Interior publica cada 15 días una estadística sobre la llegada de embarcaciones clandestinas y saltos de la valle de Melilla y Ceuta, sin embargo, no aporta datos sobre quienes mueren por el camino. Este año las entradas irregulares superan las 53.000 personas, un 153 por ciento de incremento respecto a 2017. Tampoco la Agencia Europea de la Guardia de Fronteras y Costas (Frontex), con una delegación permanente en Almería, ofrece datos actualizados sobre las muertes en la gran fosa común en la que se han convertido las aguas del Mar de Alborán.