“Cuando tengamos las mismas oportunidades, habrá igualdad”

No es la primera vez que Carlos Tejada demuestra que para él no existen los límites. De hecho, lo lleva haciendo desde hace 17 años. Con treinta años recién cumplidos, es el nadador más joven del equipo del Club Natación Máster Bahía de Almería. Muestra de su esfuerzo y superación son las 260 medallas y trofeos que avalan su imparable trayectoria deportiva. Con el corazón dividido entre la capital almeriense y la localidad de Íllar, el pueblo de su madre, el nadador paralímpico está nominado a la máxima distinción nacional a la que un deportista puede aspirar, la Real Orden del Mérito Deportivo que, cada año, concede el Ministerio a través de la comisión del Consejo Superior de Deportes.

¿Cómo se siente al estar nominado al Mérito Deportivo?

Muy orgulloso. He recibido muchos reconocimientos y siempre digo que es fruto de mi esfuerzo y de mis entrenadores. Todavía no se sabe si me lo darán, pero hay muchas instituciones que apoyan mi candidatura.

¿En qué momento empezó a practicar este deporte?

Fue a través de la Asociación A Toda Vela cuando tenía 8 años. 

¿Cuándo dio el salto a las competiciones?

Cinco años más tarde. Obtuve la licencia de la Feddi (Federación Española de Deportes para personas con discapacidad intelectual) y me traje mi primera medalla de bronce en el Campeonato de España.

¿Cómo se preparó para este momento?

Con ayuda de mis entrenadores Roberto Martínez, Lluc Albiol y con Alfonso Palacios, en el equipo de competición del Club Natación Almería. Entrenaba de lunes a sábado hasta tres horas diarias once meses al año. Me exigía mucho.

¿Cómo fueron los siguientes meses?

A través de Fanddi (Federación Andaluza de Deportes para Discapacitados Intelectuales), participé en el Campeonato de Andalucía y me traje una medalla de plata y dos de oro. 

Uno de los momentos más importantes de su carrera fue…

El campeonato de Europa de Natación de Loano (Italia) en 2010. Logré la medalla de Oro en los 1.500 metros libres y me sentí muy orgulloso al verme subido al podio con el himno de España.  

¿Qué le han aportado estas experiencias?

Pues conocer muchos países, mucha gente, sobre todo nadadores profesionales, que me han hecho sentirme arropado e integrado. 

¿Por qué decidió colgar el bañador a nivel internacional? 

Siempre me ha puesto muy nervioso tener que salir fuera. Estoy muy unido a mi familia y, aunque me acompañaban, la semana previa de la competición necesitaba estar plenamente concentrado y luego me pasaba de diez a doce días con la Federación y apenas los veía. 

En realidad, esa decisión le ha servido para seguir superándose e innovar. 

Sí. Ahora aprovecho los veranos para realizar travesías a nado y me está yendo bastante bien. Me ayuda a estar más en forma. He realizado la prueba en Carboneras, San José, Balanegra, El Ejido y Adra, entre otros lugares.

¿Cómo es su rutina actualmente?

He pasado a entrenar de lunes a viernes una hora en el Club de Natación Máster Bahía de Almería, donde mi entrenador es Lázaro García.

¿Cómo ha sido el cambio?

Me siento muy satisfecho y más relajado. Tener a mi familia cerca es vital. Ahora nado sin presión y el tiempo de entrenamiento es menor. 

¿Cuál es el balance que hace de 2018?

Solo en campeonatos nacionales en categoría adaptada y en masters, donde compito con personas sin discapacidad, he logrado dieciséis medallas.

¿Quiénes han sido sus máximos apoyos dentro del ámbito deportivo?

Mis entrenadores que han sido los que me han enseñado a dominar todos los estilos (braza, crol, mariposa y espalda), mi psicólogo deportivo Alfonso Ibáñez para animarme cuando he estado más negativo y el traumatólogo José Ángel Ruiz que me ayuda con las lesiones.

¿Cuál considera su especialidad?

Soy mucho más bueno en crol y espalda. 

¿Sigue alguna dieta específica?

Soy muy riguroso. Como mucha verdura y proteína y cuando llega una competición, incluyo pasta y arroz.

¿Qué supuso ser pregonero de la Feria?

Fue una noche mágica. Le dediqué un mensaje al alcalde para que hiciera un esfuerzo para que las personas con discapacidad se vean representadas en Almería.

¿Algún sueño que se le haya quedado en el tintero?

Fui seleccionado para los Juegos Olímpicos de Londres, pero no pudo ser. Y me hubiese gustado estar en Río.

¿Hay desigualdades en el deporte paralímpico?

Muchas. Los deportistas con discapacidad intelectual han estado muchos años fuera del panorama paralímpico y solo pueden participar en atletismo y natación de más de veinte deportes que hay. La mayoría de plazas las ocupan otros colectivos, algo que también es injusto.

¿Qué se puede hacer para acabar con estas diferencias?

Promover la igualdad. Que dejen a los ciudadanos con discapacidad practicar el deporte que quieran. En el momento en el que tengamos las mismas oportunidades que otras personas sin discapacidad habremos llegado a la igualdad en el deporte.

Algún deportista que admire…

Michael Phelps, Mireia Belmonte, Teresa Perales y Richard Oribe. 

¿Hasta cuándo se ve nadando y compitiendo?

Mientras que me guste y me haga feliz, seguiré. Para la natación no hay fecha de caducidad.