Visto bueno al cambio urbanístico para el edificio de Cruz Roja

De forma definitiva aprobaba la sesión plenaria de ayer la modificación del plan general que permitirá a Cruz Roja levantar su edificio entre las calles Obispo Orberá y la Circunvalación Ulpiano Díaz en la capital.

Tras el paso dado ayer, ahora le llega el turno la institución de seguir avanzando para que sea una realidad. Así, en unos días procederán a solicitar al arquitecto que ha realizado el proyecto los últimos retoques, con la intención de poder pedir licencia este propio mes de febrero.

Explica el coordinador de Cruz Roja, Francisco Vicente, que la intención pasa por “poner la primera piedra del nuevo edificio antes de que acabe este año 2019”.

La que será la nueva sede de la institución en Almería contará con un total de 350 metros edificables y contará con una fachada que “encaje con el entorno en el que se ubica”.

Contará este edificio con dos plantas sótano que servirán de aparcamientos y un semisótano en el que se ubicará un salón de actos  y varias salas multifunción que se puedan utilizar de forma simultánea en caso de realización de congresos.

Ya en la primera planta se ubicará la zona de recepción, el Centro de Reconocimiento Médico, y algunos despachos. 

Atención
La primera planta se dedicará al 100% a aulas de formación con la intención, según explica el propio Francisco Vicente, de “solicitar la homologación por parte de la Junta de Andalucía para impartir cursos de FPO”.  

Contarán además con una sala común de exposiciones y contará con una visión muy abierta ya se pretende que sea casi totalmente acristalada de forma que “se pueda ver desde la calle lo que hacemos, cómo trabajamos”.

En el resto de la instalación se pondrá en marcha el proyecto de mayores y dependencia, el de acogimiento familiar, el proyecto de inserción laboral para jóvenes, mayores de 45 años, y personas con dificultades.

Llegará hasta el centro de la capital también el programa de atención a familias, el proyecto de infancia y jóvenes, los espacios de encuentro y convivencia en los que hay espacios intergeneracionales, o las emergencias.

Habrá sitio también para el voluntariado, para la captación de fondos y socios y todo el aparato administrativo.

Revulsivo

Esperan que la llegada de este nuevo edificio sirva también como revulsivo al entorno ya que “allí trabajarán unas 150 personas, acudirán más de 2.000 voluntarios y pasarán por el edificio muchos socios” con lo que se convertirá en un espacio muy transitado. 

Llevar la sede de la organización  y de sus proyectos al centro acercará Cruz Roja y sus servicios a los almerienses.