El chef Ferran Adrià ha animado a los almerienses a tomarse muy en serio la capitalidad española de la gastronomía y a aprovechar el tirón que representa, como una oportunidad única para avanzar en la promoción y el desarrollo económico de la provincia, no solo en lo que se refiere al aspecto “hedonista” de la cocina, sino también, o quizás sobre todo, en relación a cuestiones mucho más amplias, como puede ser la industria agroalimentaria, y desde un punto de vista empresarial.
“Si esto se toma como una cosa de cuatro chalaos, mal vamos”, ha explicado con franqueza el más genuino representante de la creatividad y la innovación en la restauración española contemporánea este martes en la sede oficial de Almería 2019, donde el Ayuntamiento le ha rendido homenaje por su apoyo a la candidatura durante su visita a la ciudad en 2018, entregándole la chaquetilla de la Capitalidad.
El alcalde, Ramón Fernández, ha definido al ilustre invitado como “un genio creativo capaz de establecer un nuevo lenguaje en la cocina y una de las personas más influyentes y carismáticas de la gastronomía española y mundial. Su éxito es fruto de muchas horas de investigación, de innovación y de saber rodearse de los mejores, lo que le ha llevado a ser un referente de la Marca España”.
Adrià ha recuperado la idea que ya lanzó un año atrás, la de crear un museo o un gran centro mundial de vegetales, aprovechando que los productos de Almería son del máximo nivel mundial. Y ha recordado como ejemplo el éxito del Basque Culinary Centre de Euskadi.
Gran conocedor de la importancia de la comunicación y el marketing, de la necesidad, no ya de ser el mejor, sino de saber vender tu producto y tu talento, el chef del restaurante Elbulli, -ahora cerrado y que fue considerado el mejor del mundo-, Ferran Adrià también ha llamado a “ser valientes” y a saber reconocer la oportunidad de crear algo diferente que bien podría triunfar en un campo abierto a tantas posibilidades. En estos casos, advirtió en su discurso desordenado pero agudo y directo, la baza puede ser ganada “por el que primero espabile”.
Valentía
En apoyo de su apuesta por la valentía y la creatividad en el mundo de la gastronomía, se refirió a las cifra multimillonarias que ya mueve en todo el mundo – apuntó que según un estudio de la consultora KPMG el 33% del Producto Interior Bruto español está relacionado con este campo- , y en concreto a la relacionada con el mundo vegetal, pues expuso que en poco tiempo entre un 7 y un 9% de la población mundial será vegetariana.
Ferran Adrià, quien ha vuelto a recordar su conexión con Almería -su abuelo era de Huércal-Overa- también ha compartido unos minutos con los asistentes al VII Congreso de Alta Gastronomía en Miniatura, que se celebra en la sede de Almería 2019, en el que ha planteado al Ayuntamiento que organice un concurso para definir qué es la tapa y que se promocione a nivel mundial.
Posteriormente, se ha desplazado hasta el centro empresarial de CaixaBank, donde ha mantenido un encuentro con una veintena de cocineros de Almería, a quienes ha ofrecido una charla, que ha centrado en la importancia de la gestión económica y empresarial en el mundo de la gastronomía. Él mismo reconoce que empezó en la cocina en 1980 sin contar con los conocimientos necesarios y básicos sobre este asunto que, en cambio, hoy es fundamental y necesario para cualquier negocio.
También les dejó clara una idea: Hoy, ser muy bueno no es suficiente y no garantiza ni mucho menos el éxito, debido a la “competencia brutal”, y asustó con datos sobre la supervivencia de negocios de restauración. “El 50% no dura más de cinco años y el 22% no llega a los dos años”, dijo.
Los reyes del mambo
Además de contar con una mínima preparación económica y empresarial, y con estudios de mercado, Adrià explicó a los profesionales almerienses que para abrir un restaurante es muy importante “tener muy claro el tipo de negocio que quieres”. El chef preguntó a un joven cocinero presente en la sala cómo sería el suyo”. “De pescado”, contestó, sin vacilar. “¿Qué pasa, que no hay restaurantes de pescado en Almería?”, volvió a preguntarse el chef...
De ahí a que alentara a los asistentes a apostar también por la innovación, por la creatividad a la hora de decidirse por un tipo de negocio. “Algunos cocineros podemos creernos los reyes del mambo, pero un restaurante no es solo la cocina”. Es más, afirmó que estudios realizados al respecto demuestran que los motivos fundamentales que llevan a los clientes a un local no es la calidad de la cocina, sino que “el principal es el recibimiento, la amabilidad, el ambiente, el servicio, incluso la decoración”.
Adrià informó a los presentes sobre el proyecto, junto a Caixabank, para formar en las cuestiones económicas básicas para la creación de una empresa de este tipo. “Son ayudas para gestionar, pero no para triunfar”, advirtió, en cualquier caso.
Por último, el chef ofreció algunos consejos para lanzarse o continuar por la “difícil” aventura empresarial de la restauración en esta sociedad de la comunicación y las redes sociales, en las que todo cambia continuamente. “Hay que tener pragmatismo, poco nerviosismo, capacidad para saber digerir la información y, ante todo, entender que esto es una empresa”, concluyó.
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