La pareja atrapada en Kiev con su hijo, aún sin solución

Poco optimistas y con preocupación continúan viviendo su complicada situación en Kiev la familia almeriense  atrapada allí a la espera de una solución para poder regresar a España con su hijo, concebido de forma legal en Ucrania a  través de gestión subrogada, y que éste cuente con la nacionalidad española.

Según explica la propia María del Mar Friebel, madre afectada, “el Consulado sigue negando la inscripción de los recién nacidos” con lo que, de momento, no hay manera de que puedan regresar a España con la nacionalidad resuelta.

Cabe recordar que en esta situación la pareja almeriense no está sola, sino que hay una treintena de familias  esperando solución en Kiev. De hecho, según cuenta esta joven almeriense “hay dos niños que necesitan de asistencia sanitaria y lo padres han solicitado al cónsul poder volver a España para darle la asistencia que necesitan, y por respuesta les ha mandado una lista de clínicas privadas de aquí y de traductores” de forma que básicamente se les invita a que busquen atención en Ucrania.

Desde España se ha intentado también el buscar que se medie para el regreso de estas familias y, por el momento, también la respuesta es remitir a la orden del Ministerio de Justicia que les obliga a que el pequeño lo haga con nacionalidad ucraniana.

Los hechos
Los problemas de María del Mar e Íñigo para poder volver a España con su hijo se conocieron hace unos días a través de una carta en la que esta madre explicaba que “el problema en estos momentos viene porque el día 21/02/2019 se publicó en el BOE una instrucción,a instancias de la ministra de Justicia, tal y como ella reconoció en la Sexta Noche, en la que se exige para poder inscribir a esos menores como Españoles, la presentación de una sentencia Ucraniana con Exequatur. Dicho trámite es, a palabras del propio cónsul, un trámite prácticamente imposible de obtener en base a las características del actual ordenamiento jurídico ucraniano. En Ucrania, la gestación subrogada, es un proceso completamente legal y regulado por ley y que se resuelve de forma administrativa dado que al menor se le inscribe directamente en el Registro Civil ucraniano como hijo de los padres de intención, sin necesidad de la intervención de ningún juez”.

Hasta ahora era válido para poder inscribir al niño en el Consulado Español a nombre del padre de intención con una prueba de ADN.