Vox logra un diputado y queda a 11.000 votos del PP

El partido vive con cierto desánimo su enorme progresión en Almería

Rocío de Meer, Juan Francisco Rojas y Rodrigo Alonso, en el Gran Hotel.
Rocío de Meer, Juan Francisco Rojas y Rodrigo Alonso, en el Gran Hotel. La Voz
Miguel Cabrera
07:00 • 29 abr. 2019

No era euforia lo que se respiraba, precisamente, en el Gran Hotel, donde Vox Almería vivió la noche electoral, a pesar del notable incremento de votos respecto a las pasadas elecciones andaluzas, a que parece consolidarse como tercera fuerza política en la provincia, a solo 11.000 votos del PP,  y a que en la nueva legislatura contará con una diputada , Rocío de Meer.




Pero anoche, la inapelable victoria socialista pareció fundir las farolas de prácticamente todos los barrios de la derecha española, y no solo la de la madrileña calle Genova. Definitivamente, a medida que se iba conociendo que Pedro Sánchez tenía de nuevo el Gobierno de la nación en su mano, iba decayendo el espíritu de los simpatizantes de Vox que acudieron a celebrar la fiesta en Almería. Solo la valoración de Santiago Abascal por televisión provocó un primer amago de 'movilización' en las filas verdes, que apenas llenaban la mitad de la sala.




Este ánimo alicaído fue perfectamente explicado en su discurso por Rodrigo Alonso, parlamentario andaluz y número 2 al Congreso por la provincia, quien reflexionaba sobre esa sensación de victoria agridulce que se respiraba en la sala: “Inevitablemente, teníamos unas expectativas que nos había dado la sociedad, porque llenábamos todos los sitios y teníamos la esperanza de conseguir un mejor resultado, pero hay que pensar de dónde partíamos”.




Alonso, junto al himno de España a todo volumen y vivas a España, consiguieron levantar el ánimo por unos instantes a la ‘tropa’. “Hay que pensar de dónde partimos, y que hemos conseguido 24 diputados -en España- 24 voces que van a decir en el Congreso lo que nadie se ha atrevido a decir nunca”, proclamó. También afirmó que esos 24 diputados trabajarán para “quitar la ideología de género implantada” por la izquierda. 




El parlamentario andaluz elevó el volumen de su voz y se subió sobre una silla para gritar a los suyos que su partido había pasado de dar mítines “encima de un cajón, a ser votados por dos millones y medio de personas y  contar con 24 diputados”. “Y eso lo hemos hecho por España”, añadió.



Seguir luchando



Por todo ello, concluyó que lo resultados de ayer no eran motivo de decepción. “Hay que seguir luchando por España, porque mi hijo de cinco años disfrute de un país mejor y no de este socialismo cobarde”.




Antes, la flamante diputada en el Congreso, Rocío de Meer, vino a reconocer, en un tono más apagado que su compañero, la “situación especialmente grave” que a juicio de su partido se vivirá ahora “con el Frente Popular en el Gobierno de España”.


Aún así, y después de agradecer el trabajo de todos los militantes y simpatizantes que habían pasado el día entero recorriendo los colegios electorales de toda la provincia, la número uno de la lista al Congreso valoró el “brote verde” que supone el aterrizaje de su partido en la  vida pública y política española, basada, dijo, en valores “que no han muerto”, como el patriotismo o “la base de la sociedad, que es la familia”.


“A partir de ahora haremos lo que podamos, que será mucho, para dar voz a todos los españoles”, dijo antes de lanzar su ‘viva España” y de que empezara a sonar, de nuevo, el himno nacional.


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