El PP vive su noche electoral más triste desde el año 2004

El mapa de la provincia de Almería ya no está pintado de azul. El Partido Popular sufrió ayer un gran descalabro. Un descalabro histórico que se traduce en la pérdida de 20 puntos de respaldo electoral, de casi 60.000 votos respecto a junio de 2016 y de un diputado y dos senadores.

“Las matemáticas no fallan”, se escuchó anoche decir en la sede provincial del PP, en el Paseo de Almería, para justificar que justamente los votos que se han perdido han ido para Vox, que logró un escaño por esta circunscripción electoral en los comicios de ayer en el Congreso de los Diputados. 

El PP de Almería tendrá una exigua representación parlamentaria en Madrid: dos diputados (Javier Aureliano García Molina y Juan José Matarí) y un senador (Rafael Hernando). Y todo ello, a las puertas de unas elecciones municipales en las que los populares vuelven a jugarse la hegemonía en la provincia.

Tardaron mucho en comparecer los líderes provinciales del PP, conscientes desde las 20:00 horas que la noche iba a ser una noche triste, tan triste o más que aquella en la que Javier Arenas se quedó a las puertas del Palacio de San Telmo.

Vox y Pedro Sánchez

Faltaban diez minutos para las doce de la noche cuando se produjo la comparecencia en la sede del PP, mientras en un monitor de televisión aparecía su líder nacional, Pablo Casado Blanco.

Estaban tristes, serios, compungidos... los candidatos y dirigentes provinciales del Partido Popular. Intervinieron Gabriel Amat, el presidente provincial, y los candidatos número 1 al Congreso y Senado, Javier Aureliano García y Rafael Hernando.

“Vox ha sido la herramienta útil para apuntalar a Pedro Sánchez en el Palacio de La Moncloa”, dijo a modo de sentencia Javier Aureliano García. Una frase que repitió Rafael Hernando, con escaño ahora en la Cámara Alta.

Menos combativo contra la formación de Santiago Abascal fue el líder de los populares almerienses, si bien dejó Amat dejó caer que “hombres y mujeres de esta provincia se darán cuenta muy pronto que el voto que han dado a algunos partidos no ha valido para nada”

La revancha

Lejos de hacer autocrítica, los populares alnmerienses están ya decididos a darle la vuelta a los resultados de ayer con las inminentes elecciones municipales.

Javier Aureliano García avisó de su objetivo inmediato el 26-M: “Ganar en concejales y alcaldías y conservar la Diputación Provincial”.

En su intervención, los dirigentes populares también se acordaron “de los 73.000 almerienses” que han vuelto a depositar su confianza en esta fuerza política, “que se ha movilizado como nunca” para evitar que la fragmentación del voto de derechas tuviera un efecto negativo sobre el PP, como ocurrió en las elecciones de ayer.

Junto a Amat, García y Hernando estaban también Ramón Herrera, Ángel Escobar, Luis Rogelio Rodríguez-Comendador, Juan José Matarí y Maribel Sánchez Torregrosa. De ellos, Rodríguez-Comendador se ha quedado sin acta de senador, al igual que Rosario Soto.

A las doce y cuarto de la noche, la sede del PP quedó en silencio. “No siempre nos toca ganar”, dijo Amat.

Movilización popular para cubrir todas las mesas

Más de dos mil personas movilizó el Partido Popular de Almería para la jornada electoral de ayer (interventores o apoderados en todas las mesas) en lo que eran los comiocios generales con los resultados más inciertos de la historia reciente de la democracia española.

Durante todo el día, en los distintos cuarteles generales del PP en la provincia se estuvo pendiente tanto del nivel de participación - ya superior a 2016 a las dos de la tarde - como de los votos que le iba a arrebatar una formación de extrema derecha, Vox.

El propio cabeza de lista al Congreso y secretario general del Partido Popular en Almería, Javier Aureliano García, reconocía que el partido que preside Santiago Abascal iba a tener un importante ascenso en la provincia, como ya ocurrió en las pasadas elecciones andaluzas.

Se estuvo muy pendiente del desarrollo de la jornada en feudos históricos del PP como la capital, Adra, El Ejido, Roquetas de Mar y Níjar.

Experimento

En el argumentario de campaña, el PP siempre ha sostenido del riesgo de los apoyos a un “experimento llamado Vox”.

“Esta votación no va ni experimentos, ni de castigos, ni de premios. Esta votación va del futuro de nuestro país, va de España, va del futuro de nuestros hijos y nietos”, declaró por la mañana Javier Aureliano García, que depositó su voto en el colegio de Nueva Almería, acompañado del diputado provincial Fernando Giménez.

Por primera vez en muchos años, esta campaña no ha sido coordinada por García Molina, que ha cedido el testigo al ejidense Ángel Escobar Céspedes.

Casi a la misma hora que Javier Aureliano García Molina ejercían el derecho al voto en el municipio de Roquetas de Mar dos de los pilares de la organización del Partido Popular en la provincia: Gabriel Amat, presidente provincial del PP, y Juan José Matarí, candidato número 2 al Congreso de los Diputados.

Tomar nota

Sea cual fuere el resultado electoral de la jornada de ayer, el secretario provincial del PP dijo que esta formación política “tomaría nota” del mensaje en las urnas del electorado almeriense. Máxime cuando apenas quedan dos semanas para el inicio de otra campaña, la de las municipales.

Precisamente, el alcalde de Almería, Ramón Fernández-Pacheco, también se refería por la mañana a la importancia de la cita electoral de ayer en las generales.

“Este es un día histórico porque España se juega mucho y la provincia y la ciudad también”, declaró a los periodistas cuando acudió a su colegio electoral, en el Palacio de los Marqueses de Cabra.