La estructura central de la estación necesita ‘un modificado’

La antigua estación del ferrocarril va recuperando poco a poco la imagen con la que fue diseñada por Laurent Farge gracias a las obras que se están realizando con los fondos del 1,5% Cultural, y a pesar de que se encuentra ya muy avanzada la rehabilitación en esta segunda fase de las obras, lo cierto es que va a tener que quedar pendiente una parte importante de la reforma prevista inicialmente.

Explican desde Adif que los problemas encontrados en la estructura del cuerpo central del edificio de la antigua estación supone que para solventar estas patologías haya que elaborar un proyecto modificado.

Al tratarse de un problema estructural implica que actuaciones que estaban previstas en esta segunda fase de los trabajos como la renovación de las carpinterías, la cristalería y hasta las marquesinas, tengan que esperar a que se haya desarrollado este refuerzo de las estructuras por el incremento que supondría para unos pilares metálicos deteriorados.

Mientras tanto la obra continúa en esta zona central en la realización de las labores de mejora del saneamiento y del material eléctrico.

Laterales
Lo que sí va a seguir su ritmo, y de hecho ya se puede contemplar a simple vista cuando se recorre el Parque de la Estación o por la pasarela peatonal cómo se han cambiado las carpinterías y las cristalerías en los módulos laterales ya que estos sí que se van a culminar en su totalidad. De hecho explican que esta parte de los trabajos se encuentran muy avanzados y cerca de la finalización, al igual que las cubiertas.

Lo que no se sabe son los tiempos que van a alargar más las obras de rehabilitación este modificado pero parece que serán meses, con lo que el ver la estación a punto se aleja más en el tiempo.

Tercera fase
Además, no se puede olvidar que este refuerzo no es el final de una obra que tiene que tener una tercera fase para adaptar el interior del edificio al uso final que se le vaya a dar.

Hay que tener en cuenta que el Ayuntamiento de Almería quería convertir este espacio en un contenedor cultural con

espacio de restauración a través de una cesión de uso, pero bien es cierto que, de momento, esta idea que estaba cerrada con el anterior Gobierno del Partido Popular, exactamente con el ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, no ha llegado a materializarse en nada con el actual. De hecho, tras el único encuentro mantenido en Madrid entre José Luis Ábalos y Ramón Fernández-Pacheco, alcalde de Almería, el compromiso era, solamente, estudiar la posible cesión.

Parece que, entre lo que se pueden alargar los plazos de esta segunda fase con el modificado, más la necesidad de la tercera, casi dará tiempo a que llegue el AVE a la ciudad, si es que se cumplen las previsiones de que lo hagan en el año 2023.

Con respecto a la obra en sí, cabe recordar que los trabajos ya permiten contemplar las fachadas que se han limpiado recuperando tanto el color de su piedra y ladrillo, como el brillo de su cerámica verde y amarillento. Los mismos colores con los que fue concebida también para su estructura metálica y que ahora, gracias a un cuidadoso trabajo de limpieza, restauración y aplicación de pintura intumescente, vuelve a lucir en tonos verdes.

Tras el cambio de las impresionantes (por su gran porte) de las barandillas de las dos cubiertas, también se ha trabajado en convertirlas en espacio practicable. Para ello se ha cambiado el suelo, se han hecho pruebas de estanqueidad, y se han convertido en un mirador de la bahía y la ciudad que aún no se sabe si podrá ser utilizado.

Cubiertas 

Estas son las dos cubiertas de los pabellones laterales, pero la central, totalmente metálica, se está volviendo a colocar después de que se haya limpiadocon arena de sílice y se ha imprimado. Las caras interiores cuentan ahora con pintura intumescente y se ha procedido al desmontaje de los canalones laterales, con el objeto de sustituirlos por unos nuevos. De momento estos cambios ya son visibles y dan un nuevo aire al edificio.