Las familias almerienses gastaron en 2017, el último año computado, una media de 2.523 euros anuales en bares y restaurantes. Supone un incremento del 12% con respecto al año precedente. Sin embargo, a pesar de la tradición almeriense de comer fuera, no está entre las provincias andaluzas y españolas con mayores picos de consumo.
Una de las claves, según este informe elaborado por la consulta AIS Group, puede residir en el tapeo, que se traduce en un gasto medio más discreto que el de la carta de los restaurante, incluso comiendo fuera mayor número de veces en el año computado.
La media andaluza fue de 2.627 euros, un poco más elevada que la almeriense, y la española fue de 2.582, 59 euros más que el gasto en la provincia de Almería.
No obstante, una parte sustancia del Producto Interior Bruto almeriense se sustenta precisamente en el turismo y en el segmento concreto de la hostelería, que con picos de demanda, es uno de los sector que más trabajo absorbe sobre todo en época estival, según el último Barómetro del Colegio Profesional de Economistas.
El informe sobre el coste de comer fuera revela que los hogares que más gastaron en comer y cenar fuera son los hogares navarros, que en 2017 gastaron 3.435 euros en bares y restaurantes. Tras ellos aparecen las familias vascas, comenzando por las alavesas que destinaron 3.230 euros, las de Bizkaia (3.135 euros) y las guipuzcoanas (3.055 euros).
Madrid es la quinta provincia con mayor gasto en restauración (3.030 euros) y la que cierra el ranking de las que superan los 3.000 euros anuales de media. Les siguen las familias de Baleares, con algo menos de 2.900 euros y las de Murcia, que superan ligeramente los 2.800 euros.
Por su parte, las familias que menos gastaron en bares y restaurantes fueron las Canarias. Así, los hogares de Tenerife y Las Palmas apenas destinan entre 1.750 euros y 1.760 euros de media a comer fuera de casa.
Otros de los registros más bajos se dan en Badajoz (1.870 euros), Cáceres (1.905 euros), Cuenca (1.915 euros ), Ourense (1.975 euros) y Albacete (1.992 euros). La tendencia de 2017 confirma un incremento del gasto en esta partida en la mayoría de regiones.
El crecimiento más acusado se ha dado en las comunidades de La Rioja y Andalucía donde ronda el 15%, pasando en ambos casos de cifras que rondaban los 2.290 euros en 2016 a estar entre los 2.625 euros y los 2.650 euros.
Sigue la región de Murcia, donde el aumento del presupuesto familiar destinado a restauración ha subido un 13,6% superando los 2.810 euros. Tras ella, Galicia, Navarra, Asturias, Cataluña y Cantabria. Todas ellas con cifras de crecimiento de dos dígitos entre el 10% y el 12,5%.
A nivel de provincias, son Lugo, Jaén, Ourense, Valladolid y Sevilla los lugares donde las familias más han incrementado su gasto en comer fuera de casa entre 2016 y 2017. También hubo provincias donde la media descendió, como Guadalajara, donde gastaron un 12,3% menos, Huesca con un 10,8% menos y Albacete donde este gasto se redujo en un 9%.
Horarios Por otra parte, el 75% de los almerienses sale de bares todas las semanas, el 7% a diario, según una encuesta de la Sociedad Española de Dietética y Ciencias de la Alimentación.
En la actualidad, los horarios laborales y el ritmo de vida provocan, por falta de tiempo, una inadecuada alimentación y el no poder comer en casa entre semana. “De hecho, el 40% de los españoles pensamos que comer o cenar fuera es motivo de un empeoramiento de salud y una mala alimentación”, según el informe.
Almorzar en restaurantes o bares no tiene por qué estar reñido con llevar una alimentación saludable, siempre que se opte por alimentos sanos y equilibrados, según la Sociedad Española de Dietética.
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