Frente común contra los daños de la gota fría en Almería

El presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, aseguró ayer en Níjar que la provincia de Almería cuenta con el “compromiso político” del Ejecutivo de la Nación y, “me consta”, de “todas las instituciones”.

Ese “compromiso” de Sánchez Pérez-Castejón se trasladó al término de una reunión en el Consistorio nijareño para evaluar los daños ocasionados por la gota fría de la semana pasada y a la que también acudieron, entre otros, el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno,la ministra Teresa Ribera y el presidente de la Diputación, Javier A. García.

Previamente, a bordo de un helicóptero, el jefe del Ejecutivo español, sobrevoló algunas zonas afectadas en la capital y Níjar.

Y finalizada la ‘cumbre’ por las inundaciones en parte de la provincia, el presidente en funciones insistió, ante los periodistas, en que “es más que evidente” que debe estudiarse la declaración de zona catastrófica para Almería, Murcia y Valencia.

“Habrá que esperar a ver cuáles son los daños, la evaluación llevará unos días y pido paciencia a los vecinos y vecinas de las zonas afectadas”, expresó Pedro Sánchez, acompañado a las puertas del Ayuntamiento de Níjar por la alcaldesa, Esperanza Pérez, y el delegado del Gobierno en Andalucía, Lucrecio Fernández.

Añadió que aún queda “mucho trabajo por hacer”, y, a pesar de ello, “no vamos a escatimar ningún recurso” y hasta que acabe esta “crisis de protección civil” estarán desplegados los efectivos de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, Ejército, voluntarios, ONGs, ...

Sánchez reiteró su mensaje de “solidaridad” con los todos los afectados y también los tres objetivos que se ha marcado el Gobierno socialista ante esta “crisis”: prevención, adopción de medidas urgentes y recuperación de las zonas dañadas.

El jefe del Ejecutivo español tildó de “sobresaliente” el papel desarrollo por “todas” las instituciones públicas, aunque no se ha podido impedir la pérdida de vidas humanas. Una persona murió el viernes en la capital almeriense. “Podían haber sido muchísimos más los daños, tanto vitales como económicas”.

A pesar de que la provincia ha recuperado la normalidad, con cientos de hectáreas anegadas, Sánchez Pérez-Castejón recordó que esta “crisis” no ha acabado y calificó de “muy eficaz” el trabajo de todos aquellos que han participado en las tareas de rescate, incluidos los empleados públicos. “Ahora toca recuperar, aunque no desde el punto de vista emocional, las cosechas perdidas”, y para ello en la Subdelegación del Gobierno en Almería ya se tramita la información de ayuntamientos para saber los costes económicos de otra nueva riada. La última fue en 2012.