Un total de 144 niños en situación de desamparo están acogidos por familias de Almería, a través del programa de Infancia en Dificultad Social de la Cruz Roja. Aunque el número de familias inscritas en este proyecto en la provincia asciende a 119, al día de hoy existen “entre 20 y 25 menores” que esperan una que les pueda acoger de forma temporal o permanente, según ha informado este miércoles María del Carmen González, responsable del programa de Acogimiento Familiar en Almería, durante un encuentro organizado por la Cruz Roja con los medios de comunicación con motivo de la celebración del Día Mundial de la Infancia.
En este encuentro participaron padres y madres de familias que participan en este programa de acogimiento, junto a responsables de la institución humanitaria en la provincia en las áreas de Juventud y Familias.
Entre los padres se encontraba Antonio Gil, cuya familia ha cumplido ya siete años en el programa de acogimiento de urgencia. “Somos una puerta entre la situación anterior del niño y la siguiente”, dijo. Para él, no hace falta ser especial para acoger a un niño que lo necesita. “Somos personas normales, que queremos contribuir a la sociedad y facilitar una vida mejor a los niños, con un hogar como el que todos los niños deberían tener”, añadió.
También estaba Mónica, cuya familia -compuesta sus tres hijos y ella- participa en el programa de acogimiento temporal desde hace dos años y medio, y quien afirmó que habían vivido una “experiencia positiva para todos”, tanto para los niños acogidos, para ella misma y para sus hijos. “Es lo mejor que he podido hacer; siempre lo había querido, por lo que lo hablé con mis hijos, pues la acogida es cosa de toda la familia, y lo decidimos”, apuntó.
Duras despedidas
Los padres reconocieron que, a pesar de las grandes satisfacciones que les ha producido acoger a niños en situaciones muy difíciles, también las despedidas son muy duras. No obstante, algunas familias tienen la posibilidad de mantener un contacto posterior con los menores, como ha sucedido con Mónica. Otros pequeños, en cambio, se resisten a marcharse, o bien, como le pasó a Antonio Gil, idean situaciones alternativas: “Una niña de tres años que debía volver con su familia biológica me sorprendió preguntándome si su mamá podía venir a vivir con nosotros...”
El acogimiento, siempre temporal A través de este programa que la Cruz Roja tiene en marcha en España -en Andalucía solo en Almería- las familias pueden acoger temporalmente a menores en situación de desamparo, para proporcionales un entorno estable cuando las circunstancias les impiden desarrollar su vida con su familia de origen.
El acogimiento familiar no es lo mismo que la adopción, pues responden “a necesidades infantiles y expectativas en los adultos diferentes”. De esta forma, “la adopción es irrevocable y genera vínculos jurídicos entre los adultos y los niños equiparables a la maternidad y paternidad biológica. Como criterio general, la naturaleza del acogimiento es siempre temporal, su duración abarca hasta que se mejoran las situaciones que determinaron la separación con su familia de origen y se propone una solución duradera para el niño”, informa la institución.
Otros programas
Durante el encuentro de este miércoles, la Cruz Roja también informó de que en la actualidad, a través de su departamento de Familia, atiende a casi 1.300 familias y 600 niños de la provincia en situación vulnerable, a quienes se ayuda a cubrir sus necesidades más básicas, en un proyecto distribuido en siete municipios. La organización atiende igualmente a unos 60 niños de Almería en su programa de apoyo escolar, que desarrolla el área de Juventud.
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