“Sin agua, Almería se va al garete”. La frase fue pronunciada ayer al mediodía por el presidente provincial del Partido Popular, Gabriel Amat, tras concluir una reunión de parlamentarios nacionales y autonómicos de esta formación política con miembros de la Mesa del Agua.
La conclusión que sacaron fue que en estos momentos, cuando se vislumbra un Gobierno de la Nación con PSOE y Podemos apoyado por Esquerra Republicana de Cataluña (ERC), los trasvases de agua corren peligro.
Con esa contundencia se expresaron, además de Amat Ayllón, el senador popular Rafael Hernando y el portavoz de la Mesa del Agua, José Antonio Fernández, a su vez cabeza visible de la Federación de Regantes de la provincia, Feral.
Junto a ellos estaban dos representantes de la Junta de Andalucía en Almería: las delegadas del Gobierno y Agricultura, Maribel Sánchez Torregrosa y Aránzazu Martín, respectivamente.
El anuncio del Gobierno de limitar a solo abastecimiento urbano el caudal del trasvase Tajo-Segura ha llenado de preocupación a los agricultores, que temen que corran la misma suerte otras transferencias como son las del Negratín al Almanzora.
Y siguiendo con esos temores, el Partido Popular no da por garantizado que algún día llegue hasta la Comarca del Poniente almeriense agua procedente de la presa de Rules, en la vecina provincia de Granada.
Tanto el PP como la Mesa del Agua de Almería mostraron públicamente también su apoyo a las aportaciones de agua procedentes de las desaladoras, pero recordaron cómo la planta de Palomares quedó destrozada en 2012 y a día de hoy sigue sin aportar ni un litro de agua.
Con la experiencia fallida del trasvase del Ebro y el Plan Hidrológico Nacional, derogado por el entonces gobierno socialista de José Luis Rodríguez Zapatero, el senador popular Rafael Hernando avisó que el “fundamentalismo ecologista” de Podemos hará lo posible para que no se desarrollen los trasvases de agua autorizados por Ley por diferentes gobiernos.
En la misma comparecencia en la sede del PP, el portavoz de la Mesa del Agua de Almería incidía en que son 24.000 las hectáreas afectadas en Almería y que “el 25% del recurso se trata del agua que viene del Tajo-Segura que son 15 hectómetros cúbicos los que nos corresponden”. En la reunión del Círculo por el Agua “decidimos hacer una mesa de trabajo y comenzar con las movilizaciones tras las fiestas navideñas porque si no tenemos agua en Almería se acaba todo, ni el tren ni las infraestructuras”.
Una de las respuestas socialistas a la comparecencia del PP y de la Mesa del Agua llegó a través del senador Fernando Martínez López.
“Los representantes del PP de Almería hacen rueda de prensa contra el Gobierno socialista por autorizar 7,5 hectómetros del trasvase Tajo-Segura en aplicación de una ley que ellos hicieron y aplicaron cantidad de veces en situaciones similares. Basta ya de farsantes y demagogos”, escribió Martínez en rueda de prensa.
En un comunicado, el secretario de Organización del PSOE, Antonio Martínez, instó a los parlamentarios populares a que se pongan ya “manos a la obra” con la nueva desaladora del Levante y arreglen el “roto” de Galasa, la empresa pública que gestiona el abastecimiento en parte de la provincia de Almería.
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