La fuerte borrasca trajo desdicha a la agricultura pero también beneficios

La borrasca Gloria ha dejado a su paso lluvias, nieves, fuertes vientos y, lamentablemente, la pérdida irreparable de dos vidas humanas. La Naturaleza deja sentir su fuerza y, al tiempo, evidencia la escasa conciencia de la prevención que existe en la provincia, azotada con frecuencia por este tipo de catástrofes naturales que provocan con frecuencia graves daños.

Y sin embargo no todo ha sido destrucción, pérdidas y tragedias, porque la ola de frío polar ha tenido un efecto balsámico en la crisis de precios que sufre la agricultura almeriense prácticamente desde el inicio de la actual campaña del sector hortofrutícola. Los datos emitidos por el Observatorio de Precios y Mercados reflejan el incremento de las cotizaciones de la práctica totalidad de las hortalizas que comercializa Almería.

Remontada

El análisis realizado por ese Observatorio, elaborado en base a los datos que le han sido facilitados por las empresas hortofrutícolas de Almería y por la base de datos de Fiscalidad y Unión Aduanera de la Comisión Europea, señala que la llegada del frío ha hecho que los operadores internacionales hayan incrementado sus pedidos de forma notable.

Un aumento de la demanda que se adelantó incluso a la llegada de la masa de aire polar ya que en la semana anterior, cuando las previsiones meteorológicas anunciaban esa situación, ya se produjo un aumento de pedidos para poder satisfacer las necesidades de las cadenas de distribución en esta semana.

Frío intenso

Indica el informe que la masa de aire frío que ha afectado de forma sensible a todo en continente europeo ha dejado en la provincia temperaturas mínimas por debajo de los ocho grados centígrados en la mayor parte de las zonas de cultivo de Almería, zonas que aunque estaban registrando temperaturas bajas durante las noches, mantenían cálidos registros durante el día.

La consecuencia de esa bajada generalizada de temperaturas ha supuesto la paralización de las producciones en la mayor parte de Europa. En el caso de Almería el efecto ha sido una ralentización en el desarrollo y maduración de las hortalizas, especialmente notable en pepino, calabacín, berenjena y judía verde.

El resultado de esa combinación de factores es que los productos almerienses han alcanzado las mejores cotizaciones de lo que va de campaña, dando un respiro a los productores, acuciados por el descenso de rentabilidad. En el caso del tomate, que arrastra bajas cotizaciones desde el inicio del ejercicio, se produce un incremento medio de alrededor del veinte por ciento, con el tomate rama y el asurcado como los más valorados.

Fuertes subidas

En pimiento se produce un ligero descenso de las cantidades aunque los precios, con un incremento medio de veinte céntimos por kilo, han animado a muchos productores a recolectar, sobre todo de los tipos california rojo y verde. El italiano se pagaba por encima de los 85 céntimos.

El pepino ha incrementado su cotización en las dos últimas semanas en un 98 por ciento respecto a las semanas precedentes, con precios en origen superiores a 1,20 euros por kilo, siendo el tipo Almería el mejor pagado. El calabacín, por su parte, se pagaba estos días por encima de 1,30 euros en las subastas. Similar comportamiento de la berenjena que aumenta su precio en un 55 por ciento de media, acercándose al euro y medio. La judía redonda alcanzaba un precio máximo por encima de los cinco euros el kilo, aunque en bajas cantidades.