El Hospital Universitario Torrecárdenas ha puesto en marcha un sistema de localización y trazabilidad de pacientes que van a ser intervenidos quirúrgicamente en el hospital almeriense. Este sistema cuenta con los siguientes elementos: una pulsera electrónica identificativa, lectores de sobremesa, balizas de posicionamiento y un software de gestión. Para su puesta en marcha, el hospital referente de la provincia de Almería ha adquirido el equipamiento necesario: unas 150 pulseras, balizas de posicionamiento, además de los lectores, pantallas de TV informativas, servidores y ordenadores.
Manuel Vida, director gerente del hospital de referencia de la provincia, ha detallado que “de este modo ofreceremos a los familiares y acompañantes de los pacientes una mayor tranquilidad ya que conocerán en tiempo real cómo va el proceso de la persona que va a ser intervenida quirúrgicamente”.
Igualmente ha destacado que va a ser una medida de gran impacto, porque a diario en el Hospital Universitario Torrecárdenas realizamos una media de más de 50 intervenciones quirúrgicas en las que están implicados de una u otra manera tanto profesionales, como pacientes y familiares por lo que un considerable número de personas verán mejorada la atención que reciben y las condiciones de trabajo”.
La puesta en marcha de este sistema ha supuesto la implicación de un gran número de profesionales, que junto a la Dirección Asistencial del Área Quirúrgica, la Subdirección Provincial de Tecnologías de la Información y Comunicación y la Dirección de la Unidad de Gestión Clínica de Anestesia y Reanimación que conforma el bloque quirúrgico, han analizado circuitos, procesos y en general áreas de mejora que supondrán una progresión tecnológica y un avance en la organización interna, en la comunicación con el usuario y en la garantía de mantener la confidencialidad y seguridad del paciente durante el proceso quirúrgico.
El sistema de funcionamiento de esta herramienta es sencillo y consta de varias fases. Una vez que el paciente llega al hospital el día que va a ser intervenido, los profesionales le colocan una pulsera identificativa que cuenta con un dispositivo de localización que se activa en ese momento.
A cada persona se le asigna un código que es el que el familiar y los profesionales tienen como referencia para identificar al paciente. La pulsera, denominada ‘Tag’, emite señales que son recibidas por las balizas y que identifican dónde está y, gracias al software, se genera información destinada a los familiares y otra a los profesionales.
La información dirigida a los familiares se difunde a través de pantallas que se han instalado en las salas de espera y en todas las plantas, donde se puede leer el estado del paciente durante el proceso sin que nadie pueda identificarlo, salvo sus familiares a través del código que se le asignó en el momento del ingreso, garantizando así su confidencialidad.
Los estados más habituales del proceso quirúrgico del paciente son ‘En Preparación’; ‘En Quirófano’, momento en el que se está realizando la intervención quirúrgica; ‘Recuperación’, cuando el paciente ha salido de quirófano; y ‘Salida área quirúrgica’ a la que se llega cuando el paciente ya se ha recuperado.
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