Un ‘escape room’ para examinar en la UAL

Papel, boli y, en el mejor de los casos, un formulario para completar un test: este es el habitual método de evaluación para la mayoría de universitarios y, al mismo tiempo, agua pasada en algunas asignaturas de los grados de Enfermería y Fisioterapia, que han apostado por innovar hasta el extremo para evaluar a los futuros profesionales del mundo de la Salud.

“Cuando empezaron a abrirse salas de escapismo, te da la curiosidad, participas y, en ellas, piensas que puedes llevartelo a la docencia y hacerlo con los alumnos, porque hasta ahora, cuando nombras la palabra examen la gente se pone nerviosa”, expone uno de los principales impulsores de la innovadora forma de examinar a los alumnos, el vicedecano de Enfermería, Pablo Román.

Él mismo empezó a poner en práctica el ‘escape room’ como método de evaluación allá por el curso 2016-2017 y, a día de hoy, en la UAL son varias las asignaturas que los alumnos deben superar, literalmente, encerrados.

El método

Los estudiantes entran en una sala y tienen entre 30 y 45 minutos para lograr salir, logrando para ello las pistas que solo podrán obtener superando las distintas pruebas que se encontrarán en su camino hacia el aprobado. Esta condición para salir hace que, precisamente, Román defienda este método de evaluación como algo mucho más positivo que un examen al uso.

“Cuando haces un examen te puedes estar equivocando, puedes perder nota pero no tienes ‘feedback’. En el ‘escape room’, si quieres salir tienes que hacerlo bien: puedes tener suerte, hacerlo bien a la primera o equivocarte y, al no conseguir la pista para salir, hacer otro intento. Al final tienes ‘feedback’ y sales sabiendo qué es lo correcto”, explica Román.

Ahora, esta es para muchos estudiantes la mejor experiencia académica de su paso por la UAL: “Ves la recompensa cuando te preguntan si pueden volver a hacerlo... Un examen nadie te pide repetirlo;  jamás he visto a un alumno corriendo con ganas de hacer un examen”, sentencia.