Castellón pide al Gobierno “políticas de futuro” en busca de estabilidad

El portavoz de Economía y Empresa del Grupo Popular en el Congreso de los Diputados, Miguel Ángel Castellón, pedía la pasada semana al Gobierno de España “políticas de futuro” que aporten estabilidad a la economía y no “recetas fracasadas del pasado” para acabar con la incertidumbre que se está generando en nuestro país y que va a tener, sin duda, serias consecuencias en la economía como así lo están asegurando ya numerosos expertos y organismos.

Castellón, que intervenía en el pleno del Congreso, señalaba que la política económica del Gobierno de Pedro Sánchez se resume en cuatro calificativos: “contradicciones, descoordinación, improvisación e irresponsabilidad”. Y todos ellos son el resultado de la voluntad del señor Sánchez, quien según el diputado del PP “no ha dudado en poner la política económica de España en manos de la “nueva troika”: el vicepresidente Iglesias, la armonizadora Montero y el señor Rufián”.

Oposición

Con un panorama tan grave como el actual, Miguel Ángel Castellón insistía en la necesidad de que España tenga una oposición a la altura como la que está haciendo el presidente del PP, Pablo Casado, con el fin de “dotar de estabilidad a nuestra economía”.

“Pablo Casado tendió hace una semana su mano al señor Sánchez para hacer frente a nuestros compromisos con Europa; para fortalecer el sistema de pensiones de caja única y garantizar la solidaridad y la igualdad entre todos los ciudadanos; para acometer una revolución fiscal que garantice los servicios públicos y que apuntale una economía dinámica como la única válida para generar empleo; para garantizar la unidad de mercado, eliminar trabas administrativas y promover la inversión; para que el empleo sea la principal política de estado; y para defender a nuestros agricultores que hoy están desamparados. Y a todo ello Pedro Sánchez dijo no”, afirmó.

Finalmente, Castellón lamentaba que ante la oferta del PP el PSOE siga con sus planes de negociar la estabilidad del país en una mesa “bilateral, insolidaria y excluyente”: “El presidente del Gobierno no ha dudado en acudir hasta la mesa del despropósito a servir en bandeja la dignidad de un país entero”.