Los expertos son claros: ni guantes ni mascarillas contra el virus

 La presencia de la ministra de Educación, Isabel Celaá, con guantes morados de látex en la manifestación del Día de la Mujer en Madrid del domingo ha abierto el debate sobre su eficacia  contra la protección del virus. Lo cierto es que la sociedad española no parece haber prestado mayor atención a este elemento de protección frente a otros, como los geles hidroalcohólicos o las mascarillas, que han llegado a agotarse en los mercados.

Sin embargo, en otros países, como Italia, los guantes también están desapareciendo de las estanterías de los comercios y farmacias, algo que podría entenderse quizás como otra prueba más no solo del desconcierto que existe entre la población en un clima de histeria y alarma desmesurado, sino también de  que, a pesar de toda la información que se transmite, no acaban de calar los mensajes y las recomendaciones oficiales.

Y es que tanto las autoridades sanitarias nacionales como regionales han insistido una y otra vez en no recomendar ni mascarillas ni guantes para la población en general, mientras que sí han aconsejado el lavado frecuente de manos con agua y jabón o los geles de los que hablábamos y otras medidas, como el mantener una distancia prudente, de más de un metro, entre las personas para evitar el contagio.

No recomendados Los profesionales sanitarios tampoco recomiendan el uso generalizado de mascarillas y guantes, puesto que no garantizan quedar libres del contagio en casos de contacto con otras personas con el virus.
Y en algunos casos consideran que su protección es muy débil. Por ejemplo, Carlos Fernández, farmacéutico de Almería, afirma que “las mascarillas de quirófano -que se están vendiendo contra el virus en toda España- no sirven prácticamente para nada a la hora de evitar contagios”.

Pese a todo, las mascarillas siguen siendo un producto muy demandado con el que no cuentan muchas farmacias de Almería, después de que se agotara en los días inmediatos a las primeras alarmas, y además su precio ha aumentado considerablemente, hasta multiplicar por tres o por cuatro el precio en relación al tiempo anterior al coronavirus.   En el caso de los guantes, solo evitarían el contagio por contacto con superficies con virus, aunque para un uso correcto es necesario quitárselos correctamente y tirarlos después de un primer uso.