El Centro Municipal de Acogida toma medidas para proteger a los más vulnerables

Uno de los puntos en los que el control de esta expansión del coronavirus parece más complejo ante la permanente entrada y salida de gente es en el Centro Municipal de Acogida de la capital. Un centro municipal en el que los trabajadores siguen en las instalaciones de forma presencial y para el que el equipo de Gobierno ha determinado que, salvo excepciones de urgencia, deje de admitir nuevas altas o ingresos de forma que se pueda controlar la situación.

De momento siguen en marcha los servicios de comidas para los residentes, eso sí, se ha decidido realizar varios turnos para que no haya un volumen importante de gente dentro de la misma habitación. De esta forma se garantiza que se pueden guardar las medidas de seguridad dentro del comedor por prevención tanto para los trabajadores como para los usuarios.

Lo que sí ha quedado suspendido es el servicio de puertas abiertas del comedor los domingos y festivos. Esto no significa que no vayan a poder comer quienes lo necesiten, sino que, se entregarán bolsas con bocadillos y fruta.

Los trabajadores del centro municipal seguirán realizando su actividad, pero eso sí, no cursarán visitas de ningún tipo a otras dependencias municipales u otras administraciones públicas. Como medidas de prevención se les ha invitado a que acentúen la higiene para evitar restos biológicos, se ha reforzado de manera especial el servicio de limpieza con turnos de mañana y tarde, y se les ha dotado de material higiénico.

Además, para ayudar a la aplicación de estas medidas, el Centro Municipal de Acogida contará con una dotación permanente las 24 horas del día de Policía Local.

Servicios Sociales

Tampoco dejarán su puesto el personal de los Centros de Servicios Sociales Comunitarios del Ayuntamiento de Almería, que contarán siempre con un dispositivo de servicios mínimos presencial.

Este dispositivo cuenta: con un portero; un trabajador social que estará encargado de atender el Servicio de Información y Valoración (SIVA), pero siempre realizando su función de forma telefónica; así como dos trabajadores sociales que, a través de gestiones telefónicas, puedan atender los asuntos que sean de extrema gravedad.

El resto de los trabajadores, según explican desde el Ayuntamiento, deben estar disponibles de forma telefónica y los dispositivos se cubrirán con personal de forma rotatoria.