La Cruz Roja de Almería se ha propuesto convertirse en una herramienta útil en el objetivo de recuperar los niveles de empleo en el menor tiempo posible una vez que se supere la etapa más dura de la pandemia provocada por el coronavirus.
Esta crisis sanitaria ha cogido por sorpresa a la mayoría de la población y , en términos económicos, se ha comportado como un enorme terremoto tanto para las empresas como para los trabajadores, muchos de los cuales viven hoy con gran incertidumbre lo que les puede deparar el futuro.
El gran reto
Es en ese escenario en el que el Servicio de Empleo de Cruz Roja se está preparando, porque la institución considera que el trabajo es un elemento imprescindible en la recuperación económica que habrá de abordarse en los próximos meses.
Así que la organización humanitaria trabaja ya con cientos de personas que se han ido asomando a sus oficinas en las últimas semanas y con cientos de empresas que trabajan con Cruz Roja desde hace ya tiempo, a través del programa ‘Reto Social Empresarial’. Una y otra parte tratará, de llegar al esperado momento de recuperación de la normalidad con los deberes hechos.
Esa cooperación entre los dos colectivos esenciales del mercado laboral es la base del proyecto de empleo de la institución, que anuncia que concentrará toda su capacidad operativa en generar sinergias, propiciar herramientas y potenciar proyectos colaborativos, con los medios técnicos y humanos de los que dispone “para llegar a ser útiles a la sociedad y a las personas”.
Plan de acción
El operativo que pone en marcha para cumplir sus objetivos se mueve en ambas direcciones; la primera de ellas es la que está relacionada con los parados, personas en situación de desempleo, un colectivo que en estas últimas semanas está creciendo de forma acelerada. Para ellos Cruz Roja Almería ha diseñado un plan integral de preparación para la consecución del empleo.
Las herramientas son todas aquellas que el conocimiento en la gestión de recursos humanos aporta al Reto Social, un plan de acción que incluye desde información sobre el mercado de trabajo, orientación de cómo afrontar la búsqueda de un empleo, la incorporación de habilidades en nuevas tecnologías, idiomas o formación en especialidades en las que es previsible una mayor demanda de mano de obra.
Las empresas
El segundo de los caminos a recorrer es el de las empresas, un sector que desde hace tiempo ha respondido a la llamada de Cruz Roja hasta convertirse en una herramienta imprescindible. Como dice la institución, el empresarial es un sector con el que “nos sentimos orgullosos de seguir colaborando, y más aún en estas circunstancias tan difíciles”.
La realidad es que la respuesta del empresariado ha sido muy positiva desde la puesta en marcha del proyecto Reto Social Empresarial y ya son más de 400 las empresas que colaboran directamente en ese objetivo común de facilitar el acceso al mercado laboral a personas de toda condición, sin discriminación por cualquier motivo, en un proyecto que fue bautizado ‘Contrata sin’. De hecho, muchas de ellas colaboran incluso en su formación.
Confianza
Los responsables de estos proyectos, que tratan de anticiparse al momento en el que la crisis por el Covid-19 quede atrás, esperan que con ese aporte extra de preparación, formación y compromiso compartido, los hoy desempleados puedan encontrar un nuevo futuro.
Una apuesta que Cruz Roja confía en ganar contando con la confianza de empleados y empleadores, pero también en la experiencia desarrollada en los últimos años en torno al empleo, la formación específica para este fin y la colaboración empresarial.
Cooperantes
En la extensa nómina de empresas colaboradoras están algunos de los grandes grupos empresariales de Almería, casos de la entidad de crédito cooperativa Cajamar Caja Rural, del primer exportador de la provincia, el Grupo Cosentino, o buena parte de los grandes grupos agroalimentarios como la Cooperativa Agrícola San Isidro (CASI), Vicasol, Casur, Alhóndiga La Unión o el Grupo Caparrós Nature. También grupos comerciales con fuerte implantación como El Corte Inglés, Cortefiel, Alcampo o Grupo Día.
Los sectores de la hostelería o de la restauración también aportan con grupos como el Senator Hotels&Resorts o el restaurante ejidense La Costa, o el de cuidados a la dependencia, como el Grupo Clece, que no se han quedado atrás en este programa
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