Los abogados rechazan la declaración del mes de agosto como hábil

Los letrados destacan el impacto familiar para los profesionales y auguran el fracaso del plan

El decano Juan Luis de Aynat interviene en un acto en el colegio
El decano Juan Luis de Aynat interviene en un acto en el colegio La Voz
Javier Pajarón
07:00 • 06 may. 2020

El Colegio de Abogados de Almería ha rechazado el plan de agilización de la Administración de Justicia lanzado por el Gobierno como parte del proceso de desescalada en el sector.




La Junta de Gobierno aprobó un documento en que asegura que las soluciones adoptadas por el Gobierno suponen “una abierta desconsideración” al colectivo y son “inadecuadas, incompletas e ineficaces”.




El colegio profesional encabezado por el decano Juan Luis de Aynat muestra su oposición a medidas muy controvertidas como declarar hábil el mes de agosto, tradicionalmente marcado por el parón judicial y las vacaciones de los operadores jurídicos.




“La Junta de Gobierno se opone tenazmente a la habilitación judicial y procesal de los días 11 al 31 de agosto de 2020, excepto sábados, domingos y festivos, por considerarla una medida incompleta dictada a través de un cauce legislativo como poco dudoso por la vía de declarar todas las actuaciones judiciales urgentes, sin distinción”, señala en un comunicado.




Los letrados auguran un futuro oscuro a la aplicación práctica de la medida. “La habilitación de esos apenas 15 días reales está indefectiblemente condenada al fracaso dada la dificultad para llevar a cabo todas las actuaciones necesarias para la celebración de una vista en el mes de agosto”, explica el Colegio de Almería.




El problema radica, entre otras  cuestiones, en “la falta de medios personales y técnicos de la propia administración de  justicia, así como de las numerosas incidencias provenientes de otros intervinientes necesarios en el evento judicial, cuyas vacaciones no se regulan y, por tanto su asistencia y participación no están garantizadas en esas especiales circunstancias”.




“Esa habilitación generalizada resulta injusta y discriminatorio con los profesionales por su falta de concreción e impedirá la conciliación familiar e incluso el cumplimiento del régimen de visitas y en general el adecuado desenvolvimiento de las relaciones familiares de los abogados y abogadas con sus múltiples y variadas circunstancias personales y familiares durante el periodo afectado, que ha sido legal y tradicionalmente vacacional”.




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