El director de LA VOZ recoge en su carta del domingo las respuestas al interrogante de a qué se debe la baja incidencia del coronavirus en la provincia a través de expertos de distintas áreas. ¿Por qué en Almería hay menos muertes y casos por Covid?
En esta tercera entrega, la respuesta de Andrés Sánchez Picón, catedrático de Historia e Instituciones Económicas en la UAL.
"Me pregunta el director de La Voz de Almería por la razón de la baja incidencia de la pandemia en la provincia de Almería, y la primera respuesta que se me ocurre darle al amigo Pedro Manuel de la Cruz es que no lo sé. Y no lo sé porque para atisbar una contestación mínimamente solvente habría que disponer de los resultados de un estudio realizado bajo los parámetros del método científico, y tal investigación por ahora no se ha acometido. Sin embargo, si se me pidiera opinión respecto de las variables explicativas que habría que incorporar a ese trabajo, para ponderar el peso que cada una de ellas hubiera podido tener en ese especial y afortunado desenvolvimiento de nuestra provincia, se me ocurren las siguientes:
a) La extensión del virus en el momento del confinamiento. Debe haber resultado crucial en bloquear el desarrollo de la enfermedad el bajo número de contagios y de ingresados en hospitales en el momento de su inicio (sólo 1 según los datos oficiales el 14 de marzo).
b) Se ha hablado de nuestro relativo aislamiento como una barrera frente al contagio. No tenemos que olvidar, sin embargo, que semanalmente salen y regresan desde nuestra provincias centenares de camiones que transportan sus productos agrícolas hacia los mercados internacionales, y que miles de viajeros salen y entran por su aeropuerto. Habría que verlo.
c) Me cuesta incluir esta variable, porque llevo años reivindicando la absoluta necesidad de sistemas públicos de transporte colectivo en Almería y en el Poniente; pero tal vez la ausencia de trenes de cercanías o el bajo uso de sistemas de transporte colectivo (con lo que implica de una práctica espontánea de un distanciamiento social) haya podido protegernos. También habría que medirlo.
d) Estructura demográfica. Tenemos una de las pirámides de población relativamente más joven de España. Dada la mayor incidencia en edades avanzadas, este rasgo demográfico tal vez haya podido suponer un freno no ya al contagio, pero sí a la necesidad de atención médico-sanitaria.
e) Condiciones ambientales. De esto se ha hablado mucho. Temperatura y humedad menos favorables para la expansión del contagio. A ver qué nos dicen las investigaciones emprendidas.
f) Estructura productiva. Salvo en los centros de comercialización hortícola, los lugares de trabajo en Almería no se caracterizan por la masificación. Apenas tenemos tejido industrial (ni fordista, ni postfordista), y esto, junto con los masivos desplazamientos que conllevan, son factores ambientales tal vez favorables al contagio que aquí no se dan.
Fuera del modelo a estimar, estaría un factor aleatorio, que no podemos ignorar. La historia de las epidemias (en Almería, también) nos muestra que la distribución territorial no ha sido homogénea nunca. Ni en la peste de 1347, ni en el cólera de 1885 ni en la gripe de 1918. Por ahora, en esta oleada la incidencia en Almería ha sido baja. Crucemos los dedos y hagamos las cosas bien, mientras que los científicos y los sanitarios hacen su trabajo".
Consulte el artículo online actualizado en nuestra página web:
https://www.lavozdealmeria.com/noticia/12/almeria/193204/el-aislamiento-secular-ha-sido-una-barrera-contra-el-virus-en-almeria
Temas relacionados
-
Sanitarios
-
Universidad de Almería
-
Gripe
-
Confinamiento
-
Coronavirus en Almería
-
Pedro Manuel de la Cruz
-
Carta del Director